- Señalan que están siendo afectados por obras del municipio capital
- En dos meses han cerrado al menos 5 negocios por falta de ventas
Vecinos y comerciantes del fraccionamiento Trojes de Alonso, al norte de la ciudad, manifestaron su desagrado y preocupación por las obras que el Ayuntamiento de Aguascalientes se encuentra ejecutando sobre la calle Independencia, ya que en las últimas semanas han observado el cese de varios comercios a causa de la falta de ventas.
“No estamos en contra del presidente municipal, sino de la falta de planeación en las obras que andan haciendo, si él contrató a una constructora entonces se debe dedicar a terminar un trabajo”, quejándose de la manera en que se está trabajando en obras públicas pues cierran vías principales “al por mayor” sin que se observe un avance sustancial de las obras.
“Vemos que abrieron en el norte, en el sur, en el este, en el poniente, en el centro, en todas partes, y nada que avanzan, sólo hacen más tráfico y nos friegan con las ventas”, los quejosos hicieron énfasis en el poco número de trabajadores que se observan (al menos en el tramo de Trojes de Alonso), en comparación con el número de arterias en construcción, lo cual a su consideración hace más tardado el avance de las obras.
“Están mal porque vemos a los trabajadores acostados o caminando con la pala en el hombro, sin hacer nada”, como comerciantes le exigieron al presidente municipal que “pusiera atención” en lo que estaba sucediendo en la ciudad pues mientras el funcionario hace declaraciones mediáticas de su trabajo, los pequeños negocios están afectándose hasta su quiebre.
Tanto en grupo como de manera personal, los habitantes de dicha zona han intentado dialogar con el alcalde pero reclamaron lo tardado que es conseguir una cita con él en el programa de Miércoles Ciudadano o directamente en su oficina, “todos mantenemos a nuestras familias del negocio, no podemos estar cinco horas esperando a que nos atiendan”, e indicaron que en la última solicitud se les envió con otro servidor público que nunca los atendió.
Como ciudadanos reconocieron que en ocasiones son necesarias las obras de rehabilitación o de nueva infraestructura, pero reprobaron que éstas se hagan sin una estudiada planeación para evitar mayores afectaciones a las que normalmente se tienen por el cierre de calles.
Desde diciembre que empezaron las obras al menos cinco negocios han tenido que cerrar, entre ellos un expendio de pan, una cocina económica y una tienda de ropa, “todos estamos siendo afectados, mínimo somos unas 50 familias, y no es justo que no nos hagan caso”.
En un comienzo de las obras se les comunicó que las obras concluirían el 15 de marzo lo cual consideraron como periodo razonable, sin embargo, los avances no han sido los esperados y el Ayuntamiento anunció que la obra se atrasaría hasta el 15 de junio, “si ahorita llevamos dos meses y ya estamos quebrando imagínense de aquí a junio ya valimos todos”.
La señora Martha Ruiz Esparza Robles cuenta con un negocio de papelería de la cual dependen cinco familias; por las bajas ventas tuvo que descansar a una trabajadora madre soltera, “yo tengo una máquina de Melate, si no cumplo con una venta semanal de cuatro mil pesos me la retiran”, de dicha máquina gana 300 pesos por semana, mil 200 pesos al mes, con lo cual le paga el sueldo a una empleada dos semanas, “ahorita ya no tengo para pagarle a una persona, ella es madre soltera y tiene dos niños”.
Un comerciante de esa zona paga una renta mensual promedio de siete mil pesos, anteriormente salían con un ganancia de al menos lo doble que les permitía mantenerse sin problema alguno, ahora las afectaciones han llevado a la desesperación de no alcanzar ni el pago de la renta.