- Se necesitan sanciones ejemplares a policías que violen los derechos humanos para erradicar esas acciones
- Que el ombudsman no sólo declare, sino que actúe en beneficio de los derechos humanos
- La Comisión de Derechos Humanos cuestiona si la CEDH y la SSP se encuentran efectuando las capacitaciones de sensibilización y educación que desde la administración pasada se plantearon como obligatorias
Al cierre del año 2014 la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) dijo contar con quejas hacia elementos de la policía municipal de Aguascalientes por extorsionar a hombres homosexuales sexoservidores, tanto con dinero como con “pagos en especie” para dejarlos trabajar; fue hasta esta semana cuando la Comisión legislativa de Derechos Humanos se percató de la situación, haciendo un llamado a que no sólo se quede en declaraciones mediáticas sino que como autoridad competente, realmente el ombudsman actúe contra las afectaciones a los derechos humanos de los quejosos.
Ya que la CEDH tiene las facultades y los canales conducentes para realizar las investigaciones y posteriormente para emitir las recomendaciones contra los elementos acusados, los legisladores integrantes de esta Comisión esperan que las autoridades de la corporación y el Ayuntamiento capitalino comiencen a acatar las recomendaciones y erradiquen este tipo de situaciones, que son muestra de la falta de tolerancia y capacitación de los elementos de seguridad.
“Todas las dependencias, y más las de Seguridad Pública, deben entender que cuando hay un elemento que viola los derechos humanos y abusa de su papel de autoridad, debe ser sancionado de manera ejemplar”, lo cual no corresponde a la Comisión ni al Congreso del Estado, sino a la propia corporación a la cual pertenece este elemento; sin las sanciones ejemplares, este tipo de abusos continuarán e inclusive llegarán a elevar su nivel de violencia hasta acabar con la vida de una persona.
“Para que esto deje de pasar necesitamos que la CEDH trabaje de la mano con la Procuraduría General de Justicia, que no se quede sólo en una declaración mediática, que investigue a fondo y presente las denuncias correspondientes”, para los diputados, el escudarse en que no se tienen pruebas de quiénes son los elementos que afectaron a los ciudadanos quejosos y por ende no pueden presentar una demanda jurídica, no es propio de un organismo defensor de los derechos humanos.
Además de las sanciones ejemplares, la Comisión legislativa de Derechos Humanos cuestiona si la CEDH y la Secretaría de Seguridad Pública se encuentran efectuando las capacitaciones de sensibilización y educación que desde la administración pasada se plantearon como obligatorias, “esas capacitaciones hacia los elementos de seguridad deben ser permanentes, no cada año”, puesto que hay una área de educación y capacitación al interior de la Comisión que debería estar realizando ese trabajo, y en caso de que sí se estén aplicando, analizar por qué no están funcionando, tomando en cuenta que ésta no es la primera vez que se registran quejas de esta naturaleza.
Desde la perspectiva de los legisladores, estos cursos deben de aplicarse no sólo a los policías que salen a las calles, sino también a los comandantes y subcomandantes, pues los oficiales siguen estrategias de sus altos mandos, “tanto mandos medios como los mandos altos deben de capacitarse en materia de derechos humanos”.
En cuestión del marco legal, tanto Anayeli Muñoz Moreno como Mario Álvarez Michaus (presidenta y vicepresidente) coincidieron en que se ha trabajado en el perfeccionamiento de las leyes en materia de derechos humanos tanto en el ámbito local como en el nacional, sin embargo, a quienes les corresponde hacerlas valer no lo hacen y de ahí comienzan las afectaciones y violaciones a las garantías individuales de las personas, “la ley está muy clara, sólo hace falta que realmente la apliquen”, tanto lineamientos como protocolos de actuación ya fueron renovados, por lo tanto, las corporaciones de seguridad (municipales, estatales, ministeriales) tienen la obligación de seguirlas, sobre todo en el área de la tolerancia hacia la diversidad sexual.