- Intercambiaron acusaciones sobre la honestidad de las administraciones municipales
- Las representantes del PAN discutieron contra todas las bancadas asuntos partidistas
De manera puntual los 27 diputados que integran la LXII Legislatura se dieron cita el día de ayer para debatir y aprobar los dictámenes de la Comisión de Vigilancia sobre las Cuentas Públicas 2013, convirtiendo el salón de sesiones en un espacio de gritos, abucheos, aplausos y reproches, mediante debates políticos que desviaban el tema base: las cuentas públicas.
Mientras algunos de sus compañeros de bancada se encontraban fuera del Pleno, Martha Márquez aclaró que no aprobaría una cuenta que tiene más de 62 millones de pesos por resarcir y un dictamen que contiene con un porcentaje mayor al 50% de observaciones no solventadas, enfatizando que el estudio de las cuentas había sido en terreno de opacidad, al tiempo de presentar un video grabado de un celular donde se observaba a Víctor Manuel Rocha Jaime, padre del diputado priista Eduardo Rocha Álvarez, en las instalaciones del Órgano Superior de Fiscalización. Lo cual causó polémica y desagrado a la bancada priista, por considerarlo una falta de respeto hacia el funcionario estatal.
Indignado y molesto, Luis Fernando Muñoz López le recordó que las denuncias se hacen con pruebas y números, “siguiendo el criterio de medición, en administraciones pasadas se demostró con números la afectación al pueblo, recursos que fueron destinados a cuentas particulares de quien estaba en el poder”, destacándose que los 14 mil 576 millones de pesos ejercidos en el 2013 por el gobierno estatal actual, están demostrados con documentos detallados y sólo observaciones de un dígito.
“La honestidad sí se puede demostrar con números, no por nada en administraciones pasadas panistas se tuvieron graves afectaciones al erario público, yo termino diciéndoles: ¿y el tomógrafo, apá?”.
Mientras el público presente -en su mayoría simpatizantes del PRI- ovacionaba al legislador, Juana Alicia Espinoza de los Monteros y Martha Márquez comenzaban una discusión por su actuar al interior de la Comisión de Vigilancia, enfatizando en que las acusaciones realizadas por la representante de Acción Nacional no estaban sustentadas en un análisis correcto, “le pregunto, diputada, por qué si estaba en desacuerdo aprobó el dictamen de las cuentas públicas del gobierno estatal. Quién sabe quién le haga los discursos porque se nota que ni los estudia”.
Explicó que de último momento la diputada Márquez envió un documento con fecha del 19 de noviembre con cuestionamientos bajo criterios equivocados, viendo errores donde sólo había procedimientos bien ejecutados, “además, era la que más preguntaba cuando se nos estaba dando las explicaciones, pareciera que estaba distraída con otros asuntos”.
En tono sarcástico, Espinosa de los Monteros dijo que durante la revisión de las cuentas públicas, Márquez desperdició su oportunidad de estudiar adecuadamente y aportar propuestas a los integrantes de la Comisión, en su lugar, aseguró que se dedicó a generar un clima de incertidumbre, fundamentado en interpretaciones incorrectas de la ley y falsedades, “para concluir pone este video, que en lo personal es una falta de respeto y qué vergüenza que sea diputada”. Respondiéndole, la panista le señaló que sus discursos se los hacían en el PRI, lo que hizo que la representante de Nueva Alianza exasperara y desde su curul, defendiera su capacidad para redactar discursos.
Escudando el trabajo de la Comisión de Vigilancia ante las denuncias de la panista, Gilberto Gutiérrez destacó haber empleado semanas de análisis a la revisión, tanto de manera individual con cada uno de sus asesores como de manera integral con los cinco integrantes de ella; criticándose las observaciones realizadas por Márquez, alzó la voz ante las interrupciones de la panista para indicar que los reclamos no fueron ejecutados en el momento indicado, haciendo un trabajo incorrecto, pues aunque dice no estar de acuerdo con las cuentas, ella firmó un dictamen a favor.
Mientras Sylvia Garfias protegía a su compañera de partido, personas del público gritaban constantes blasfemias, el presidente de la mesa directiva solicitó orden pero sólo hasta que se le fue exigido.
Avanzándose al debate del dictamen de la cuenta pública del municipio de Aguascalientes 2013, Sylvia Garfias subió a la tribuna denunciando la compra de árboles a sobreprecio, la gran cantidad de afectaciones al pavimento con las lluvias (baches), la entrega de licencias comerciales sin fundamentos, así como la compra de una casa con valor de diez millones de pesos, mostrando fotografías del inmueble pero sin documentos que respaldaran su denuncia.
En su calidad de exsecretario de Servicios Públicos, Enrique Juárez reclamó a su antecesora por querer entorpecer el debate de las cuentas con temas sin sustento documental, asegurando que la compra se hizo con base en estudios ambientales para conocer la factibilidad de la supervivencia de las especies en la ciudad, “es fácil alegar, pero sin documentos todo se lo lleva el aire, le recuerdo, diputada, que en el último semestre de Alfredo Reyes Velázquez se le observaron casi 111 millones de pesos”.
Continuando con el debate, Martha Márquez reclamó que la campaña política de Lorena Martínez Rodríguez fue operada con recursos públicos, además de que su programa del fotoradar (las fotomultas) fue establecido con el objetivo de recaudar recursos para su beneficio personal.
Anayeli Muñiz Moreno hizo un llamado a las representantes de Acción Nacional que superaran la derrota y dejaran de tergiversar la información, “recordemos todos los robos y afectaciones al estado por funcionarios de su fracción partidista, todos tienen cola que les pisen, así que no vengan a pedir transparencia si Acción Nacional no la da primero”.