Emy Reyes insistió: Coquito, acompáñame al desayuno en el University Club. Ándale, va a estar buenérrimo. Usted se preguntará, apreciable lector, estimada lectora, ¿Por qué la cocino-política duda en asistir a un delicioso desayuno? ¡Pues porque era en la Ciudad de México! Respondería yo.
Chilaquiles picosos. ¡Ah, qué picosos chilaquiles! Pero qué ricos sin duda estaban esos que degustamos en el University Club del DF, un grupo de señoras. La ocasión era la reunión mensual de la Asociación Jefas Empresarias de México, A. C. (AJEM); una agrupación de aproximadamente ochenta empresarias de la hotelería, la construcción, seguros y fianzas, servicios funerarios, fabricación de máquinas de coser, diseño-fabricación de ropa y joyas, entre otros ramos.
Invitada de honor. Cuando disfrutaba yo de un plato de frutas frescas, adornado con crema dulce batida, y un panecillo con mantequilla derretida bien crocante, arribó la invitada de honor de esa mañana. Era nada menos y nada más que la procuradora federal del Consumidor, licenciada Lorena Martínez Rodríguez ¡Vaya! La querida Lore Martínez, ex presidenta municipal de Agüitas. ¡Ah caray! -Me pregunté- ¿Qué hace la Defensora del Consumidor con las empresarias? ¡La que se va a armar! Láncese Usted por un café bien calientito, que ahora le platico.
Contra la corrupción. En ese “desayuno de damas”, Lore Martínez explicó a las empresarias su programa de combate a la corrupción en el actuar de los verificadores de Profeco. Informó de la entrega a cada verificador, de un dispositivo electrónico mediante el cual, la información recabada en campo se “sube” de inmediato a sistema; lo que evita componendas posteriores al levantamiento.
También informó, la ahora Defensora del Consumidor, que se está por arrancar un programa por el cual se vigilará en tiempo real a los verificadores de Profeco para garantizar que sus actos de autoridad se ajusten a lo que marca la Ley de Protección al Consumidor y los protocolos correspondientes.
Vela en el entierro. Hasta este momento, las empresarias reunidas en ese selecto desayuno, estaban atentas a lo expuesto por Lorena, pero cuando se abordó la situación de tan distinguidas damas como consumidoras, el evento se convirtió en una gran conversación. Todas las ahí reunidas exponían ante “La Defensora” sus quejas, sus dudas y hasta sus reclamos como consumidoras y, claro, como amas de casa. Fue en ese momento en que todas las presentes caímos en cuenta en que por lo que respecta a Profeco, cualquier ciudadano tiene “vela en el entierro”.
Paciente, Lore Martínez respondía todo tipo de inquietudes y proporcionaba información de páginas para consulta o números telefónicos para reportes. La verdad es que el tiempo resultó insuficiente ante el cúmulo de intervenciones de las damas empresarias y la gentileza con que Lorena atendía a cada una de ellas; por lo que se acordó celebrar una reunión posterior.
Orgullo Hidrocálido. Quizá lo más interesante de ese desayuno con empresarias mexicanas en el University Club de la Ciudad de México, fue la evolución que tuvo el evento; al comenzar con una recepción muy formal a la procuradora y transformarse de a poco en un auditorio volcado hacia Lorena Martínez.
Para esta cocino-política fue una mañana de orgullo hidrocálido, tanto por la hidrocálida que reunía a ese grupo tan selecto, la señora Emilia Reyes, hija del memorable diplomático y poeta Jesús Reyes Ruiz; como por el liderazgo que la expresidenta de Agüitas, Lorena Martínez,ejerció en ese grupo de excepcionales señoras, al ganar en ese espacio no sólo el respeto, sino la simpatía y admiración de las mismas.
Habla una empresaria mexicana: como empresarias tenemos que actuar apegadas a valores; tener buenas bases en todos los sentidos, auto educarnos y manejarnos con la verdad ante todo. Tenemos que dejar atrás la deshonestidad y comenzar a cumplir todo aquello que ofrecemos. Rebeca Samaranch, empresaria de la importación y la exportación.
Señoras ¡Señorononas! Aquí le van estimado lector, apreciable lectora, algunas de las señorononas que alcancé a distinguir entre las asistentes, como Judith Jannini, Leticia Mayer, Magdalena Rodríguez, Lupita Alcántara, Esther Misrachi, María Elena Mendoza Vda. de Méndetl, Rocío Díaz, Norma Morel, Lucía Merlos y Tere Díaz, entre otras. Asistió también una representante de la conocida empresa “Pineda Covalín” y varias titulares o gerentes de empresas de la energía verde, turismo rural, desarrollo de proyectos, salones de belleza, negocios electrónicos, revistas y publicaciones, imprentas, instituciones educativas, inmobiliarias, agencias de comunicación, fabricación de plásticos, productoras de café y chocolate, consultoras legales y fiscales, “home-working” y capacitación empresarial entre otras.
Cerró la reunión Magda Rodríguez, de familia restaurantera, con un llamamiento a la paz en nuestro país. Seamos embajadoras de la paz, dijo la carismática empresaria, y luego despidió a Lorena Martínez con una hermosa presentación en primera persona, en la que le auguró un futuro pleno de éxitos y le ofreció el apoyo solidario de las mujeres empresarias reunidas esa mañana.
Esta cocino-política, agradeció a la Sra. Emy Reyes, la grata reunión, se despidió de Lore Martínez, Defensora del Consumidor y se trajo a casa café chiapaneco, producido por empresarias mexicanas. Si Usted, apreciable lector, querida lectora, se da una vuelta por esta, su cocina, para mí será un gusto ofrecerle un poquito.
¡Nos vemos en la próxima! Recuerde Ud. que en esta su cocina, se come, se lee, se estudia y se conversa de todo, particularmente de política.