¿Dominancia o preponderancia? Mientras terminaba el mundial, nuestros demócratas legisladores federales, incluida la ya famosa “tele-bancada”, con presencia en ambas cámaras y claramente inclinada a favorecer el interés de los privados con los que tienen evidentes y poco disimulados vínculos, se dio a la tarea de procesar en el conocido modo fast track las iniciativas del ejecutivo en el tema de las leyes secundarias de telecomunicaciones que debería acompañar a la reforma constitucional de 2013.
Dicha legislación secundaria fue aprobada sin apenas discusión en el Senado y luego en la Cámara de Diputados, para aparecer publicada el 15 de julio pasado en el Diario Oficial de la Federación. Así que como se ve, no todos los asuntos de palacio van tan despacio…pero más allá de la complejidad técnica y jurídica que entraña el sentido y desarrollo secundario de la reforma constitucional de 2013, la discusión pública en las cámaras de la legislación secundaria en materia de telecomunicaciones debería arrojarnos un potente haz de luz sobre un asunto fundamental: ¿servirán dichas normas secundarias para democratizar la estructura de los medios?, ¿habrá diversidad de contenidos y pluralidad?, ¿se combatirá a los monopolios?, ¿se dotará de plena autonomía al IFETEL, como lo manda la constitución, y permitirá la convergencia legislativa en consonancia con la reforma constitucional? Al respecto van unas cuantas preguntas agrupadas en sendos ejes temáticos:
¿Se consagran y amplían derechos fundamentales? Qué bueno que no vamos a pagar larga distancia en nuestras llamadas y que no perderemos el saldo del celular, pero vayamos un poco más allá: la reforma constitucional del 2013 estableció claramente derechos nuevos, como los de las audiencias -el máximo derecho es el de tener acceso a diversidad, pluralidad y calidad de contenidos audiovisuales-, los derechos de los usuarios -evitar el uso y abuso del monopolio telefónico-, los derechos de acceso a universal al internet, y los derechos de y a los comunicadores comunitarios e indígenas. ¿Las normas secundarias abonan en esa dirección?
¿Se consolida la autonomía constitucional del órgano regulador?La reforma constitucional se construyó con la idea que la regulación del sector se hiciese desde un organismo autónomo, capaz de resistir y aun combatir las ambiciones de control político del gobierno. En los hechos, tal parece que a este Ifetel le quedarán las funciones más incómodas y discrecionales, como hacer los “lineamientos” para los defensores de audiencia; estará subordinada a la Profeco (una institución pensada para otro tipo de servicios) en materia de derechos de los usuarios; y sus atribuciones quedarán restringidas.
¿Es una legislación convergente?Las leyes secundarias avanzan hacia una normativa que garantice condiciones de equidad y de competencia en el proceso de convergencia entre todos los medios audiovisuales, como televisión abierta, televisión de paga, internet, telefonía fija y telefonía móvil?
¿Es una legislación con tendencia liberalizadora o autoritaria?¿Fomenta el desarrollo y la participación de los medios comunitarios e indígenas? ¿Fomenta la autonomía de gestión de los medios públicos en manos del gobierno federal y de las entidades federativas? ¿El modelo prefigurado ayuda a combatir la censura oficial en los medios públicos? ¿Qué pasará en la red? ¿Se mantiene la posibilidad planteada en la iniciativa original de que las autoridades ministeriales violen la privacidad de las comunicaciones en internet?
¿Se favorece el desmembramiento de los monopolios?¿Las leyes secundarias frenarán la concentración de la televisión? ¿Facilitarán la licitación inmediata de las dos cadenas de televisión abierta digital prometidas por el gobierno federal? Recordemos que Televisa mantiene el 70% del dominio del mercado de la televisión abierta y tiende a crecer más en su dominio de la publicidad y de los contenidos, así como adquirir más empresas de televisión de paga. Televisa y su socio, TV Azteca, son las únicas empresas que pueden dar servicios convergentes de “cuádruple play” en México, es decir, video, banda ancha en internet y telefonía fija y móvil.
Desde luego que es deseable que las ciudadanas y los ciudadanos de Aguascalientes les preguntemos por el sentido de su voto, y el razonamiento y explicaciones que al respecto nos puedan aportar nuestros Senadores y Diputados Federales.
@epasillas