- Los conflictos se arreglan platicándolos: Fernando González de Luna
- Se necesita que por lo menos el 80% de los asuntos sean con salidas alternas y solamente el 20% llegue a los juzgados
Fotos: Gerardo González
Listo para ser inaugurado, el Centro de Mediación del Poder Judicial… Antes de que se acumulen los juicios y sea imposible, como en Francia, construir más juzgados para atenderlos, alertó el presidente del Supremo Tribunal de Justicia, Fernando González de Luna.
Con el reloj de arena implacable de su gestión, a unas dos semanas de concluir como titular de uno de los tres poderes del estado, el presidente magistrado González de Luna, alude en su balance para La Jornada Aguascalientes, la trascendencia del Centro de Mediación, al que ya no le falta ni la trapeada y está listo por ponerlo en servicio.
“El Centro de Mediación era una de las cosas que me preocupaban desde que llegué, por la necesidad de las soluciones alternas. Es otra cosa que no se ha entendido, ¿que hacen falta juzgados? Sí, pero no podemos crecer exponencialmente, crear juzgados al infinito. ¿Dónde los vamos a colocar?”, se preguntó.
Relató el fenómeno de Francia, donde se crearon tantos juzgados que ya no tiene dónde colocarlos y los costos de los edificios públicos son muy caros, “lo que hacen es: ‘Te contrato como juez, siempre y cuando tengas un lugar para ejercer como juez’. Algunos jueces rentan sus casas para operar como juzgados, en cocheras, bibliotecas de las casas, son juzgados”.
El Poder Judicial les da una pequeña renta, porque ya no tienen para donde crecer, el Poder Judicial no tienen dinero para pagar rentas completas. “Eso es un problema muy grave, la solución que ya puso Francia para evitar todo esto, que España apenas implementó en 2010 y Chile ha insistido mucho; a Estados Unidos e Inglaterra les funciona muy bien. Éstas son las salidas alternas”.
Recordó: “Desde que estuve como juez penal vi que los asuntos se arreglaban platicando, trabajé un año en la Junta de Conciliación y Arbitraje y había una persona, que no era abogada pero les enseñaba a dos que tres, clases de derecho laboral, Vicente Chávez, presidente de la Junta; él tenía ese espíritu de conciliador, fue excelente. Aprende uno a conciliar en los asuntos de querella, yo tenía esa idea”.
Añadió: “Teníamos un terreno para hacer un Centro de Mediación, donado por el municipio de Aguascalientes desde hace ocho años, proyecto que se paró, no se le dio seguimiento y decidimos impulsarlo, además de que nos querían quitar el terreno y me di a la tarea de construirlo”.
González de Luna dijo que el gobernador siempre ha sido una persona que escucha y también, sin un costo para el Poder Judicial, con recursos federales y estatales, “terminamos ya el Centro de Mediación, después de ocho años de estar muerto”.
Y es un Centro de Mediación que “ojalá me toque a mí inaugurarlo -le toca al gobernador- espero que esté en su agenda; está en Ojocaliente, cerca del templo de Santo Domingo. Un edificio con 14 salas para mediar, una de ellas para minusválidos, otra para estudiantes, con auditorio; salas de juntas, edificio chiquito pero funcional. La meta es echarlo a andar (en estos días) y que realmente funcione con las reformas legales actuales, con la oralidad va a hacer esa función”.
Porque está comprobado a nivel internacional, que para que el sistema oral funcione en cualquiera de sus ramas: civil, familiar, penal, “se necesita que por lo menos el 80% de los asuntos sean con salidas alternas y solamente el 20% llegue a los juzgados; si no hay ese balance el sistema se va a saturar. Pero ya llegaron las reformas para hacer obligatorios estos medios alternos y eso va a ayudar muchísimo a reducir las cargas de trabajo y también a acortar la necesidad de más juzgados”.
Remató: “Una Sala de Mediación funciona con un mediador y una secretaria, un juzgado funciona con 14, 16 gentes. Podemos crecer mucho, la justicia será mucho más rápida y la gente quedará más satisfecha. Ese es uno de nuestros grandes logros”.
PIE DE FOTO (Gerardo González)
Centro de Mediación del Poder Judicial, en Ojocaliente y Barberena Vega, cerca del templo de Santo Domingo. Un edificio con 14 salas para mediar, una de ellas para minusválidos, otra para estudiantes, con auditorio; salas de juntas. “La meta es echarlo a andar (en estos días) y que realmente funcione con las reformas legales en puerta, con la oralidad va a haber esa función”