- Jesús Medina aceptó que son dichas organizaciones quienes no han cumplido con sus obligaciones
- El miembro de la dirigencia estatal del PT hizo referencia a los resultados del Informe País sobre la Calidad de la Ciudadanía en México
Jesús Medina Olivares, miembro de la dirigencia estatal del Partido del Trabajo (PT), aceptó que son los mismos partidos políticos quienes no han cumplido con su obligación de sensibilizar y representar a la ciudadanía, lo que se ha traducido en que sean los principales responsables de que exista una baja calidad de la ciudadanía en el país.
Refirió que los partidos han quedado mucho a deber, y aceptó también que muchos partidos en lugar de destinar recursos a la generación de una ciudadanía responsable, los erogan en actividades de convivencia y organización de cursos y talleres de manualidades, entre otras cosas.
El excandidato a alcalde por la capital hizo mención de los resultados que presentó apenas la semana pasada el Instituto Nacional Electoral (INE), concernientes al Informe País sobre la Calidad de la Ciudadanía en México, y puso énfasis en cuestiones como el hecho de que el 72 por ciento de los mexicanos desconfía de otras personas, donde sólo la Iglesia, el Ejército y los maestros superan la mitad de la confianza.
Asimismo, confirmó que son los institutos políticos quienes han determinado que la población a través de dicho estudio, perciba una democracia precaria, ya que el 53 por ciento prefiere la democracia y el restante 47 por ciento aprueba la instauración de un sistema autoritario.
Añadió algunas otras cifras que se muestran en el estudio como el que el 53 por ciento crea que es importante el respeto de la ley, pero a la par de ello el 66 por ciento considera que ésta no se respeta. Respecto a los estados, Medina Olivares retomó el que el poder legislativo en los estados no supere el 20 por ciento de la confianza de la ciudadanía, lo que dijo, “obliga a que la única opción a la que se pueda recurrir para disminuir los índices negativos, sea una amplia Reforma del Estado, y no un remedo como la que se aprobara recientemente”.