- Las unidades básicas de vivienda son de 40 m2, con 2 recámaras, sala, comedor y baño
- Inversión de 10.8 millones de pesos en beneficio de igual número de familias del oriente de la ciudad
El secretario de Bienestar y Desarrollo Social, Alberto Solís Farías, Édgar García Zamarripa, titular del Instituto de Vivienda y Ordenamiento de la Propiedad y el director general del Fondo Nacional de Habitaciones Populares (Fonhapo), Ángel Ramón Islava Tamayo, entregaron 103 unidades básicas de vivienda con una inversión de 10.8 millones de pesos en beneficio de igual número de familias del oriente de la ciudad.
Islava Tamayo advirtió: “No hay lugar para la simulación, la desviación o la corrupción; estas casas no son acciones clientelares y sí, un modelo confiable, sólido y resistente a la corrupción y el desvío”. Ahí donde lo único que florecía era la desesperanza, sobre la humedecida y oriental Línea Verde de la ciudad, el Gobierno del Estado construyó su vivienda -de 40 metros cuadrados, en dos recámaras, sala, comedor y baño- a 103 familias pobres que no tenían más que un “terrenito”.
Con ello, diría el director del Instituto de Vivienda Social y Ordenamiento de la Propiedad, se benefició a unas 400 personas; “con esto ya no queremos ofrecer vivienda, sino empezar a entregar hogares”, resaltaría a su vez el titular del Fonhapo, Islava Tamayo.
Estaba previsto que el acto fuera presidido por el gobernador Carlos Lozano de la Torre, “pero problemas de agenda se lo impidieron”, excusaría el secretario de Bienestar y Desarrollo Social, Alberto Solís Farías, a quien acompañaron el presidente del Poder Judicial, Fernando González de Luna, y con la representación del Congreso del Estado, Verónica Sánchez Alejandré.
En la carpa instalada en un terreno mojado, lodoso en algunos sectores, daba una muestra de la pobreza urbana de la zona, apenas dignificada en algo por la Línea Verde, donde también estuvieron, a propósito, los diputados Luis Fernando Muñoz López y Enrique Juárez Ramírez, además del alcalde Antonio Martín del Campo, los delegados de las secretarías de Desarrollo Social, Norma Esparza Herrera; de Economía, Otto Granados Franco, así como del Infonavit, Mario Guevara Palomino.
Zamarripa estimó en unas 400 las personas beneficiadas, a las que no les costará nada la vivienda y además, es parte de la Cruzada contra el Hambre, que contempla también acciones de alimentación y sanidad, y como dijera Solís Farías, del Programa 65 y Más, del Seguro Popular y otros más.
“Me gusta Fonhapo”, confesaría Islava Tamayo al iniciar su discurso, “porque me permite acercarme a la gente humilde, para ofrecerle una vivienda nueva”… Más adelante le adelantó a Zamarripa: “De lo que me pediste hace rato, de una vez te digo que sí; que cuentes que ello”.
Luego sabríamos que el director del IVSOP, Zamarripa, le había solicitado a Islava recursos para otras 100 viviendas de iguales características, es decir, de 40 metros cuadrados, para quienes tengan un terrenito y que tampoco les cueste nada, como parte de la Cruzada contra el Hambre.
“Para ser beneficiarios tienen que tener un terreno, con servicios públicos y cumplir con el perfil socioeconómico, de ganar menos de 2.5 veces el salario mínimo; se les da a quienes más lo necesitan”.