- Consideran que con Reforma Energética “el país ya no tiene para dónde hacerse”
- La organización se mostró crítica ante las implicaciones de la reforma educativa y energética
- De no cumplirse las expectativas de estas reformas, la sociedad tendrá que movilizarse y exigir resultados
Se cumplirán dos años desde que el Ejecutivo federal, encabezado por Enrique Peña Nieto, planteara una serie de Reformas estructurales que pretenden modificar el rumbo del país, y que desde la perspectiva de los especialistas y organizaciones de la sociedad civil, no han logrado el cometido esperado, siendo aprobadas durante los últimos dos años las de mayor trascendencia.
A dicha perspectiva se ha sumado el Movimiento Antorchista, quienes han manifestado un grado de escepticismo sobre los efectos y resultados de las modificaciones legales, al dudar que se puedan cumplir con los planteamientos promovidos por los actores políticos.
Sobre el tema habló María de la Luz Sifuentes Barba, presidenta de la organización en Aguascalientes, quien hizo énfasis en los resultados de las reformas Educativa y Energética. Subrayó que la primera tiene algunos aciertos, pero criticó que se quieran copiar tal cual los modelos de otros países que tienen situaciones económicas diferentes, por lo que añadió “con eso nuestros maestros quedan en desventaja”.
Señaló que si bien la reforma pretenden mejorar la calidad educativa, el apoyo para los maestros es insuficiente. “No es posible que un albañil gane más que un maestro, no es por menospreciarlo pero el esfuerzo que significa ser maestro hace pensar que no ha sido reconocido aun cuando haya maestros que queden mal”.
En lo concerniente a la Reforma Energética, Sifuentes Barba aseveró que con esta propuesta aprobaba la situación del país ya no deja para dónde hacerse. “El tema ya estaba abierto al capital extranjero, la reforma lo único que hizo fue legalizar algo que ya se hacía pero que la gente desconoce”.
La lideresa de los antorchistas en el estado estableció que la organización, tanto a nivel nacional como local, no rechaza abiertamente las reformas, al prever que son una posibilidad de mejora que se encuentran a la espera de identificar, pero añadió que estas no deben de ser el reflejo de modelos existentes en otras latitudes, sino complementarlas para lograr los resultados deseados. “Si no se cumplen los efectos esperados, la población tendrá que reunirse y exigir que se cumplan las promesas que hicieron los políticos”.
pinches muertos de hambre, estos mercenarios de la política, a ver si les da el grifo de Lozano sus despensas