Hace ya tiempo que en nuestro país se implementó un régimen económico, político y social al servicio del mercado; sus ideas y principios recaían principalmente en una utopía, cuando sus principales fundadores clásicos como Locke, John Stuart Mill, David Ricardo, Adam Smith, Tom Paine, Geremy Bentham entre muchos otros, cuando impulsaron las bases principales del liberalismo y al mismo tiempo establecieron un “ideal Estado”, en donde se pensaba que la riqueza en algunos cuantos individuos sería el motor principal de desarrollo que ayudaría a los demás estratos de la sociedad, el individualismo se implementó como la base del desarrollo social y la poca o nula intervención del Estado en asuntos económicos se adoptó como “la mejor medida de progreso” obligando a éste a privatizar sectores estratégicos para su verdadero crecimiento. Las ideas arraigadas del liberalismo fueron transformándose poco a poco hasta llegar a lo que hoy conocemos como neoliberalismo siendo en su esencia los mismos fines sólo que con más “libertades”. Hoy podemos observar que estos principios han sido erróneos y que no han cumplido con lo planteado, absorbidos en su momento por el llamado “capitalismo salvaje” y eso lo podemos constatar todos los días al observar la realidad de nuestro estado, un claro ejemplo, cuando el servicio de agua se concesionó se buscaba un servicio eficiente, eficaz y de calidad para la población de Aguascalientes dejando este servicio básico y público a responsabilidad del sector privado, han pasado poco más de 20 años y este servicio se ha vuelto ineficiente, ineficaz y con poca calidad para la ciudadanía; además de esto, sus costos cada año más elevados no necesariamente mitigan las irregularidades del líquido vital para todos los usuarios, tan sólo en el 2007 el consumo mínimo de 20 metros cúbicos tenía un costo de 93.68 pesos de acuerdo con datos CCAPAMA, hoy por esos mismos 20 metros cúbicos se pagan 146.49 pesos, lo cual significa un incremento del 63.9% en un periodo de siete años.
Además la concesionaria transgrede el artículo 104 de la Ley de agua potable, al adoptar el criterio de 2 meses de mora, en lugar de 3 para suspender el servicio. El conflicto en el que se encuentra inmersa “Proactiva medio ambiente CAASA” es un asunto del cual su servidor como representante de la ciudadanía de Aguascalientes no puede hacer oídos sordos; no se puede permitir que esta concesionaria siga actuando de la manera irresponsable como la ha estado haciendo hasta la fecha, y que el Gobierno municipal y el Instituto del Agua de nuestra entidad permitan este atropello a los habitantes del Municipio capital.
Preocupado por la calidad de vida de nuestros ciudadanos y como representante popular me he sumado a pedir se integre una comisión tripartita (Instituto del Agua de Aguascalientes, Comisión Ciudadana del Agua Potable y Alcantarillado del Municipio de Aguascalientes y Comisión Legislativa de Recursos Hidráulicos de la LXII Legislatura) y elabore un informe detallado al Honorable Congreso del Estado respecto a la problemática en la prestación del servicio del agua potable y alcantarillado, esperando una respuesta para así poder exigir sanciones a la empresa responsable y hacer valer el derecho inalienable con el que contamos todos los aguascalentenses, el de recibir un servicio de agua eficiente, eficaz y de calidad con un costo accesible para todos.
Cuidemos el agua y paguemos lo justo…
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