Sólo queda esperar otro año y ver si con los nuevos “dueños” las cosas cambian (o el equipo) porque Necaxa continúa inoperante, a pesar de lo que puedan argumentar directivos y cuerpo técnico, la cosa es sencilla, ¡resultados!
Es de esperarse que para el próximo torneo se dediquen a conseguir el título y se dejen de la misma verborrea, “apóyenos”, “jugaremos como si cada partido fuera la final”, etc, etc.
Una vez más dejaron colgada a la afición de primera que a pesar de los sinsabores que le “brinda” su equipo, continúan asistiendo al inmueble de la colonia Héroes y creyendo que el anhelado ascenso llegará.
Habrá que echar un vistazo al ventajoso contrato que el personaje a que ahora se encuentra privado de su libertad realizó cuando el alcalde, con el grupo Televisa, con bombo y platillo anunció que el equipo Necaxa (Hidro Rayos, término que ya quedó en el pasado) llegaba a la Tierra de la Gente Buena, proveniente del DF, específicamente del Estadio Azteca.
Aquel, al parecer en su Cláusula Décimo Tercera, habla que si el equipo desciende y en tres años consecutivos no regresa al máximo circuito, el municipio y el Patronato tendrán derecho de traer otro equipo de Primera División
Cuando las cosas se vinieron abajo con el descenso del equipo Necaxa, las personas que compraron los palcos en el estadio, por gusto o por obligación, alzaron la voz para pedir un equipo de Primera División, obteniendo como respuesta los contratos hablan de “equipo profesional” y la Liga de Ascenso es profesional.