- La edad promedio de las jóvenes embarazadas es de 16 años pero ha habido casos desde los 11
- Debido al índice de embarazos infantiles y adolescentes, DIF estatal tuvo que implementar un programa de prevención desde primaria
Itzel Acero
Ante el aumento de casos de embarazos en adolescentes de entre once y 17 años, el DIF estatal cuenta con un programa especial de prevención y atención de embarazo infantil y adolescente, mismo que opera de forma gratuita en las escuelas tanto públicas como privadas, aunque también es aplicado en grupos de jóvenes (mujeres y hombres) que ya estén conformados y que haya sido solicitado por algún titular.
El programa consta de dos temáticas en particular: prevención y prenatal-post natal. El primero se aplica en alumnos de cuarto año de primaria hasta preparatoria, con quienes trabajan con bebés virtuales (siete en total), por medio de un manual de trabajo de doce sesiones, que trata de temas de autoestima, información sobre género, sexualidad y planeación de vida, con la finalidad de que los jóvenes tengan una mayor información que les permita tomar la mejor decisión en sus vidas.
Aunque Estela Enríquez, coordinadora del programa, reconoció que dicho manual enviado por el DIF nacional indica el trabajo con jóvenes de secundaria en adelante; en Aguascalientes se tuvo que implementar desde el nivel primaria debido a la gran incidencia de casos de embarazos en edad infantil, “hemos tenido casos de embarazos en niñas desde once años, lo cual quiere decir que su vida sexual activa la empiezan desde antes”. Cabe destacar que la mayoría de estos casos no siempre son por abuso sexual sino por conciencia de la menor.
Los municipios del estado que mayor número de casos registran -al menos ante el DIF estatal- son Aguascalientes, Jesús María y Rincón de Romos; sin conocer exactamente las razones de sus cifras, la especialista en sicología y coordinadora del programa indicó que hay factores que hacen que las jóvenes no tomen una buena decisión y comiencen su vida sexual desde muy niñas; la primera es la cuestión familiar, cuando hay un padre ausente ya que esa falta de imagen paterna y figura masculina en casa hace que ellas lo busquen; mientras que en el caso de los varones casi siempre es por la información errónea que reciben de los medios de comunicación y la presión social de “dejar de ser virgen para ser hombrecito”.
Según las estadísticas de la Dirección de Desarrollo Familiar de este sistema, la edad promedio de las jóvenes embarazadas es de 16 años, pero se han tenido casos desde los once años. Por año están recibiendo un promedio de 249 casos de embarazos en adolescentes: de doce años, un caso; de trece años, tres; de 14 años, 22; de 15 años, 51; de 16 años, 125; de 17 años, 170; lo que puede resultar que conforme se aumente la edad se elevan los embarazos aunque los estudios resuelven que la vida sexual activa la inician desde su edad primaria. Durante el 2010, Aguascalientes figuraba en el segundo lugar a nivel nacional de mayor índice de embarazos infantiles y adolescentes, para el 2013 se redujo al quinto lugar, “no es nada honroso figurar en esta lista, pero al menos hemos logrado disminuir en número gracias a los trabajos informativos”.
Aunque son temas controversiales se ha tenido una buena apertura con los padres de familia con ayuda del Instituto de Educación, los directivos de las instituciones y las asociaciones de padres de familia, “no es tan fácil pero los padres comprenden que son temas muy necesarios para la vida de sus hijos”, además de utilizar un programa de concientización sobre la importancia que tiene la comunicación entre padres e hijos.
La segunda temática de Prenatal y postnatal, se aplica en las jovencitas que ya están embarazadas atendidas en los centros de salud y grupos en comunidad formados; en éstos se capacita a diferente personal de los municipios para que se repliquen los talleres y pláticas de atención; se les ofrece talleres de seis sesiones sobre lo que pasarán durante su embarazo, así como la canalización a los servicios de sicología, medicina o atención jurídica.
En cuanto a los recursos, Estela Enríquez subrayó que desde el 2010, cuando se implementó dicho programa por parte de DIF nacional, la inversión ha aumentado conforme a los resultados. En un inicio se comenzó con 55 mil pesos anuales, después se aumentó a 75 mil 500 y para este año fueron 150 mil pesos.