- El director y creador de la historia pretende dar una reflexión sobre los abusos de las instituciones religiosas
- La ópera prima de Christian Díaz fue escrita en conjunto con Fernando del Razzo, editada por León Felipe González, y Axel Michael Muñoz Barba participó como sonorista
La tarde de ayer el director de la película González, Christian Díaz acompañado del actor Harold Torres que protagoniza el largometraje, explicaron la historia, los retos y sus planes a corto y mediano plazo, unas horas antes de que fuera proyectada en la sala de Cinépolis Sur como parte del bloque de competencias del Festival Internacional de Cine de Aguascalientes.
Siendo una fuerte crítica a las instituciones religiosas, González es la historia de un hombre común y corriente que no tiene trabajo y graves problemas financieros que por azares del destino entra a trabajar a una iglesia, pero no a una común sino una con una manera muy particular de reclutar a la gente.
A partir de estos conocimientos, la sicología del personaje empieza a descalabrarse poco a poco, la irracionalidad de esta institución y su funcionamiento empieza a reflejarse en la personalidad de González. Aunque podría sonar un poco turbia y densa, la curva dramática es muy accesible para el público pues contiene, a lo largo de sus 102 minutos de duración, fuertes dosis de suspenso que evitan hacerla tediosa y aburrida.
Para el director, esta historia habla sobre esas instituciones religiosas que muchas veces se dedican a engañar aprovechándose de las necesidades y problemáticas de las personas; pretende provocar cierta reflexión en la población hacia las instituciones que en muchas ocasiones confía ciegamente la gente sin cuestionarlas pero que en vez de funcionar a beneficio manipulan y sólo buscan obtener cierta ganancia. También entra la manipulación de los medios de comunicación, instituciones bancarias y de crédito.
El FICAGS es el tercer festival de cine que visita esta película en toda la república mexicana; se pretende, una vez concluida su ruta por festivales, proyectarla en las salas de los cines antes de que concluya el 2014.
Al coincidir en sus respuestas sobre las dificultades que presentan los cineastas iniciadores, destacaron que son los mismos que para cualquier cineasta mexicano: la imposibilidad de llegar al público, causado por la forma en cómo se maneja estructuralmente el sistema de distribución en el país, “es una cosa que esperamos se pueda cambiar y modificar para que la gente tenga la oportunidad de ver la gran cantidad de películas que se están haciendo en México”, mismas que obtienen premios internacionales y son admiradas por todo el mundo pero que lamentable en su propio país no son conocidas.
Para Harold Torres la dificultad se aumenta por las exhibidoras que mantienen un pleito entre las películas gabachas y las mexicanas colocando a estas últimas en horarios muy incómodos para el público y que por lo tanto no son consumidas de la manera esperada.
Siendo la ópera prima de Christian Díaz fue escrita en conjunto con Fernando del Razzo e integrada por talento aguascalentense con León Felipe González como editor y Axel Michael Muñoz Barba como sonorista. Ambos exalumnos del Centro de Capacitación Cinematográfica (CCC) en donde se formó Díaz, “ahí los conocí en mi época de estudiante, siempre hemos tenido una relación de trabajo e intercambio de ideas”, por lo tanto al seleccionar el equipo que formaría parte de González, decidió invitarlos a trabajar, sobre todo por la calidad profesional de su trabajo, “fue una feliz coincidencia que ya los conociera”. León Felipe González fue nominado a los premios Ariel y ha editado varias películas en cartelera como Los últimos cristeros.
Aunque Díaz reconoció que el único contacto con Aguascalientes ha sido a través de ellos, destacó estar enterado de la gran actividad cinematográfica en el estado sobre todo por jóvenes estudiantes; el FICAGS por sí solo es una prueba de que hay hambre y sed de cine en este estado, “estos espacios son esenciales para dar promoción y difusión de todo lo nacional y para enseñarle a la gente que sí hay talento mexicano”.
Como en sus anteriores festivales, la expectativa de los creadores de González es que nuevos públicos conozcan su trabajo para que el día de mañana que se exhiba en alguna cartelera de cine sea consumido y así poco a poco mejore el cine mexicano.