- La diputada Lourdes Dávila señala que a 100 días de gobierno, el municipio no ha retomado el tema
- El cambio de partido político en el poder no debe significar el dejar de lado proyectos humanos de gran necesidad
Tras la visita a su distrito, la diputada Lourdes Dávila subrayó su preocupación por el asunto de la Antigua Línea de Fuego ubicada al poniente de la ciudad ya que el sábado asistió al lugar observando la verdadera miseria humana en la que viven alrededor de 23 familias.
“Es un asunto que no quiero que se deje en el olvido”, si bien la anterior administración capitalina inició un proceso de negociación con los dueños de los locales, que puntualizó conocer como muy avanzado, pero a 100 días de haber tomado la presidencia Antonio Martín del Campo no se ha visto que se retomara el tema.
“Más de 20 familias viven en las bodegas, es lo mismo: baño, cocina y recámara, no tienen agua y viven en la más absoluta miseria humana”, además de tratarse de un foco de infección sanitaria, promiscuidad, drogadicción y delincuencia. Destacó haber encontrado un “picadero” donde van personas a drogarse y que han atacado a los propios habitantes del espacio sin importar que haya menores.
El proyecto de rescate había sido planeado para que a más tardar el 30 de noviembre del 2013 fuera derrumbada la zona, para que se entregara el terreno al gobierno municipal entrante con la libertad de usarlo como vivienda o construcción de infraestructura pública, ello con la responsabilidad de reubicar a todas las familias que viven ahí, sin embargo por cuestiones legales el proyecto quedó en manos de la administración actual con seis millones de pesos etiquetados para la compra de los locales, (700 pesos por metro cuadrado, que es el valor catastral; cada local tiene entre diez y 16 metros cuadrados).
Para la legisladora un cambio de partido político en el poder no debe significar el dejar de lado proyectos humanos de gran necesidad, pues según el extitular de Desarrollo Urbano, Francisco Guel, la negociación ya estaba avanzada con al menos 40 de los propietarios, “sería un retroceso injusto para la población el que no se continúe el proyecto”, por lo cual hizo un llamado a la presidencia municipal a visitar el lugar y percatarse de la extrema situación en la que se encuentra el lugar.
Con desagrado y preocupación señaló haber observado a niños descalzos caminar sobre jeringas usadas, preservativos y desechos humanos, así como haber recibido quejas de los vecinos del lugar de los fraccionamientos Los Sauces y Colinas de San Ignacio.
Foto: Roberto Guerra
