- Convoca joven fotógrafo a personas con tatuajes a posar para un muro fotográfico
- Jóvenes participantes reconocen ser víctimas de discriminación y abuso de autoridad
A propósito del escándalo que provocó una mala declaración del jefe de seguridad municipal sobre las personas tatuadas, las cuales serían tomadas como principales sospechosos de delincuentes, el joven diseñador textil y fotógrafo, Édgar Acero Luna, convocó a jóvenes de entre 18 y 30 años a posar para una sesión fotográfica en la parte trasera de la Plaza de Armas.
En un inicio la convocatoria llegó a manos del alcalde capitalino Antonio Martín del Campo que se pensó, se trataría de una manifestación en contra del municipio por la malinterpretación del operativo de seguridad, sin embargo a su llegada el fotógrafo explicó su proyecto al funcionario sin que eso incluyera algún acto manifestante que agraviara la paz pública.
Con la finalidad de crear un proyecto visual titulado The Tattoo World consistente en un gran muro de fotografías con personas tatuadas, Acero Luna inició su convocatoria la tarde de ayer en la capital de las 16:00 a las 20:00 horas para trabajar fotografías individuales con 20 a 30 tiros en posiciones naturales que el modelo quisiera “la gente tatuada es como cualquier otra persona, profesionistas, amas de casa, padres de familia, jóvenes emprendedores, trabajadores que sólo por el tabú del tatuaje tiene problemas para hacer su vida normal”.
En busca de lograr llegar a la cantidad de mil personas fotografiadas visitará estados como Guanajuato, Guadalajara, Distrito Federal y Zacatecas, entidades en donde ya recibió confirmaciones de personas tatuadas interesadas en participar en su proyecto.
“Existen texturas, formas, historias, hay de todo en un tatuaje pues es una expresión personal no exclusivo de gente delincuente”, uno de los objetivos del proyecto es levantar conciencia sobre las personas con algún tatuaje para que se comprenda que tienen la libertad y derecho de hacer lo que quieran con su cuerpo, en sí será el mostrar a todas las personas conservadoras que gente tatuada no es antisocial, de un color específico ni delincuentes, sino un ser humano como cualquier otro.
Por su parte, el alcalde municipal invitó al joven fotógrafo a colaborar en algún proyecto con el Instituto Municipal Aguascalentense para la Cultura (IMAC) aprovechando su inquietud por el arte fotográfico, sin embargo Édgar Acero Luna recordó que su proyecto es totalmente ajeno a un gobierno o institución por lo que no tiene la intención de acceder a la invitación.
Entre los participantes, un grupo de jóvenes de entre 18 y 20 años subrayó para La Jornada Aguascalientes que es muy complicado salir a la calle sin ser señalado o atacado tanto por la sociedad en general como por las autoridades de seguridad pública, “cuando caminamos por el centro nos catean, detienen y hasta nos quitan cosas como refrescos o jugos pues dicen que estamos consumiendo alcohol cuando no es así”, generalmente se les indica que están drogados o que si robaron algo, “nos discriminan”.
Para conseguir trabajo es más complicado aún pues con tener un solo tatuaje se les niega la contratación, en las escuelas también han recibido algún tipo de discriminación, “en la escuela de artes nos daban ballet y cuando vieron que tenía tatuajes y perforaciones me bajaron puntos”. El haber aceptado participar en este proyecto les representa una posibilidad de llamar la atención y tratar de ganar un poco de respeto entre la sociedad “somos igual que todos, el simple hecho de tener un tatuaje en la piel no significa que soy menos que el que no tiene nada”, subrayó un adulto joven trabajador de una institución bancaria que también participó en la sesión fotográfica.
La palabra tatuaje proviene del vocablo polinesio tatau que representa el toque de un tambor y deriva de la partícula ta que significa marcar; en palabra latina tatuaje es estigma que en los diccionarios modernos significa “marca hecha con un instrumento afilado” o “marca para reconocimiento hecha en la piel de un esclavo o criminal”.
En el año 1991 se encontró en un glaciar a un cazador de la era neolítica con la espalda y rodilla tatuadas, antes de dicho descubrimiento la persona tatuada más antigua era la sacerdotisa egipcia Amunet adoradora de Hathor, diosa del amor y la fertilidad.
Según Consulta Mitofsky, el ocho por ciento de los mexicanos mayores de 18 años tienen algún tatuaje en su cuerpo; de ellos, el 13.4 por ciento se encuentran en un rango de edad menor a los 30 años mientras que el cuatro por ciento está en mayores de 50 años.
También señala que a pesar de las creencias tradicionalistas, son menos las personas de bajo nivel económico y menor escolaridad con costumbre de tatuar su cuerpo que los que tienen un estatus económico y social mediano, siendo más hombres que mujeres los que se tatúan.
Buen post, el tatuaje es un arte milenario arraigada en muchas culturas occidentales, orientales,….