- Se dispone de 10 bebés virtuales y de un simulador de embarazo
- En los talleres también se involucra a los padres de familia para que tengan mayor comunicación con sus hijos
En la Casa del Adolescente se les imparte taller para evitar embarazos precoces, para lo cual se dispone de diez bebés virtuales que se prestan a los jóvenes, tiene una duración de seis meses y se busca concientizar al adolescente para que comprenda la gran responsabilidad que significa un hijo, y sobre todo cuando los padres están tan jóvenes.
Los talleres son teóricos y prácticos, por lo que el asistente recibe semanalmente una plática de una hora sobre distintos aspectos del embarazo, y de manera complementaria se tienen que hacer responsables del cuidado de un bebé virtual durante ocho días. Los jóvenes se llevan al muñeco a sus casas para que entiendan lo complicado que puede resultar a su edad asumir el compromiso de la paternidad.
El taller se llama Educando para ser padres, y el objetivo es prevenir embarazos precoces, debido a que se les brinda información realista de cómo puede cambiar su vida en caso de que se conviertan en papás. Se les hace hincapié en cómo un hijo a su edad puede truncar su formación académica y también la posibilidad de que tengan un mejor futuro, debido a que por la obligación que adquieren, su prioridad es alimentar y cuidar al niño, y en ocasiones no pueden seguir estudiando. Asimismo, se les habla sobre su vida social, ya que por atender al bebé no podrán salir con sus amigos a divertirse y socializar como cualquier joven lo haría en esta etapa de la vida en la que comienzan a definir su personalidad.
Este momento son 60 los jóvenes que asisten al taller, sin embargo, la meta es llegar a los 300 en un lapso de seis meses.
El curso está diseñado de tal manera que se involucra a los padres de familia, también para hacerles conciencia de que si su hijo llegara a convertirse en padre, no se adjudiquen responsabilidades que no les competen, ya que muchas veces los abuelos asumen el peso de la manutención y crianza del bebé y los jóvenes, al no representarles mayor problema el hijo que acaban de tener, vuelven por segunda ocasión a convertirse en padres.
Este taller está ligado a otras pláticas como la drogadicción y alcoholismo, y de cómo los bebés pueden sufrir severos problemas de salud cuando alguno de los padres es adicto.
Junto a los bebés virtuales, se dispone en la Casa del Adolescente de un simulador de embarazo que aparenta ser el vientre de una mujer en el noveno mes de gestación, y las jóvenes se lo ponen durante varias horas para que entiendan lo complicado que es llevar más de 10 kilos adicionales a los suyos y de cómo este estómago abultado les impide hacer sus actividades normales.
Con información del DIF estatal
Foto: Archivo LJA