Según la OMS, actualmente sólo una de cada 10 personas que necesitan cuidados paliativos, o atención médica tanto para aliviar el dolor, como para reducir los síntomas y el estrés causados por enfermedades graves, recibe esa atención. Las necesidades no atendidas han quedado descritas por primera vez en el Atlas of Palliative Care at the End of Life (Atlas Mundial de Cuidados Paliativos al Final de la Vida), publicado conjuntamente por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la World wide Palliative Care Alliance (WPCA).
En el caso de México, de acuerdo con la clasificación OMS-WPCA se encuentra en nivel “naranja” correspondiente al que proporciona los cuidados paliativos CP en forma aislada… Tal cual como la mayor parte de América Latina. Lejos aún de países como Argentina y la India en donde la provisión ya es generalizada. Los niveles más avanzados en CP los encontramos en los países nórdicos, en los de lengua inglesa, Japón y parte de Europa. En las dos terceras partes del globo terráqueo apenas se están “construyendo las capacidades” para poder otorgarlos.
Hay que destacar que debe ampliarse el acceso hoy inadecuado a los cuidados paliativos en todo el mundo, dado que con el envejecimiento de la población, las tasas de mortalidad se incrementarán y la demanda de atención tenderá también a aumentar.
Dar acceso, comprendería desde superar obstáculos como la falta de políticas que reconozcan a los cuidados paliativos como necesarios, tanto al final de la vida como durante las enfermedades progresivas; hasta que haya recursos humanos, materiales y financieros para las asociaciones que están implementando estos servicios, incluidos los tres sectores (social, público, privado) con el fin de garantizar por lo menos cobertura universal a los medicamentos esenciales, especialmente analgésicos. Así de urgente entonces es ofrecer y otorgar capacitación y conocimiento a los profesionales de la salud, voluntarios de la comunidad y a los miembros del sector público sobre los beneficios de los cuidados paliativos.
Los Sistemas Nacionales de Salud y las Legislaciones locales deben atender lo antes posible estas necesidades en materia de salud y en forma generalizada. La OMS calcula que 20 millones de personas necesitan anualmente ese tipo de atención en el último tramo de su vida, de las cuales el 6% son niños. El estudio también señala que sólo 20 países en el mundo han integrado los cuidados paliativos en sus sistemas de salud, cuando el 80% de la demanda de esos tratamientos proviene de los países de ingresos medios y bajos, que aún no los tienen disponibles. Los cuidados paliativos, no sólo son de carácter médico, abarcan también ayuda psicológica y emocional para aliviar el sufrimiento de la persona que padece una enfermedad en estado avanzado y trabajan, como ninguna otra disciplina, con sus familiares.
La OMS, aseguró en el informe, que sólo una de cada tres personas que necesitan ese tipo de cuidados padece cáncer, otras tienen enfermedades progresivas que afectan a órganos vitales y también hay pacientes con problemas de salud mortales, incluidos el VIH-SIDA o la tuberculosis resistente a los medicamentos.
Podemos estimar una demanda de CP en México de entre 200 mil y 300 mil pacientes en etapa terminal cada año. Además, el costo de este tipo de cuidados, a diferencia de lo que se piensa, es ínfimo comparado con los gastos hospitalarios en los que se incurre por carecer de ellos. Máxime si se incluyen todas las personas que podrían beneficiarse en una etapa anterior a la enfermedad, y a los suyos.
Básicamente en toda Latinoamérica, con excepción de Costa Rica y el Cono Sur integrado por Chile, Uruguay y Argentina, se encuentran los cuidados paliativos en un nivel muy incipiente, así como en la mayor parte de la humanidad.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) adoptó, la definición propuesta por la Asociación Europea de Cuidados Paliativos como el “cuidado total activo de los pacientes cuya enfermedad no responde a tratamiento curativo. El control del dolor y de otros síntomas y de problemas psicológicos, sociales y espirituales es primordial”. Destaca también que los cuidados paliativos no deberían limitarse a los últimos días de vida, sino aplicarse progresivamente a medida que avanzan las enfermedades y en función de las necesidades tanto de los pacientes como de sus familias.
Clasificación de los países del orbe con base en su avance en materia de Cuidados Paliativos 2014
Fuente: Worldwide Palliative Care Alliance 2014