- Establece que el gobierno y opinión pública de Texas confunden la culpabilidad con los derechos consulares
- México debe insistir en los tratados y convenciones internacionales para que no se repita dicha situación, argumentan
Para Carlos Heredia Zubieta, especialista en temas internacionales y miembro de la División de Estudios Internacionales del Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE), la reciente ejecución del mexicano Édgar Tamayo en el estado de Texas, no es el primer caso ni el último que se presente al menos a corto plazo.
Heredia Zubieta estableció que el fenómeno responde a dos situaciones fundamentales al identificar en primer lugar el estado actual que guarda Estados Unidos al respeto de los tratados y convenciones internacionales, específicamente el de Viena, la cual no fue firmada por el estado de Texas, amparándose con ello de brindar las garantías suficientes a los encarcelados. Así como el que la opinión pública de dicho estado y su gobierno, dijo, se encuentran errados al confundir la culpabilidad de un individuo en referencia con el delito cometido, con las garantías y derechos elementales que debe recibir, específicamente en el caso de la atención consular, esto último que ya ha sido ganado por México en sendas ocasiones a través de litigios ante organismos internacionales.
Al respecto, añadió que no es la primera vez que ocurre ni será la última y adelantó que de hecho en el mes de abril ya se encuentra visiblemente otro caso similar al de Tamayo, el cual aseveró, no diferirá “ni un milímetro” de la ejecución celebrada hace una semana. Por lo que adujo, a México no le queda más que evaluar si resulta positiva la compartimentalización a través de las relaciones comerciales con el vecino país del norte y la ciudad mencionada o bien hacer énfasis e insistir en los tratados y convenciones ya establecidos, y de esta manera llamar la atención de Washington, a razón de una creciente preocupación mexicana.
Asimismo, al cuestionarle si el acto en que Estados Unidos desestimó las recomendaciones del gobierno mexicano pudiera traducirse en una afectación a la relación bilateral entre ambos países, el especialista en temas internacionales destacó que ello no sucederá, argumentando que las naciones asimilarán el hecho según les convenga para no mermar los acuerdos ya establecidos en materia de intercambio comercial y seguridad nacional.
Finalmente, se anticipó a establecer que seguramente en la próxima reunión entre Obama y Peña Nieto, en el marco de la reunión de líderes de América del Norte, será un tema que, si bien no está plasmado en la agenda de temas a exponer por tratarse de una situación irritante, seguramente habrán de retomar y serán cuidadosos con el manejo ante los medios de comunicación quienes, señaló, serán los primeros interesados en abordarlo.
Foto: Roberto Guerra
