- Cuauhtémoc Escobedo, inconforme con respuesta del General Eddy
- Los servicios periciales son claves para nuevos Juicios Orales: Muñoz Moreno
- Se puede hacer más con inteligencia que con dinero
El coordinador del grupo parlamentario del Partido de la Revolución Democrática (PDR), Cuautémoc Escobedo Tejada, no estuvo de acuerdo con la respuesta ofrecida por el secretario de Seguridad Pública, Rolando Eugenio Hidalgo Eddy, que le dijo: “Ocupamos la plaza con policías para que no la ocuparan los maestros”.
El legislador perredista, al igual que los diputados de oposición como Marco Arturo Delgado Martín del Campo; del Movimiento Ciudadano, Oswaldo Rodríguez García; del Partido del Trabajo, Jesús Rangel del Lira; de Nueva Alianza, Salvador Dávila Montoya; y los panistas Mario Álvarez Michaus y Adolfo Suárez Ramírez, formularon diversas preguntas a los funcionarios estatales que comparecieron en el Congreso del Estado.
Los operativos y resultados del Mando Único, al interior y en los límites del estado, así como las averiguaciones previas y el quehacer pericial, dieron por resultado que en el espectro global sí hay trabajo de seguridad y justificadas razones para que Aguascalientes sea uno de los estados del país con menos índices de inseguridad.
Entre las preguntas mejor formuladas estuvieron las de Cuauhtémoc Escobedo que cuestionó los operativos policiacos contra los maestros; Anayeli Muñoz Moreno con el tema de la tortura y los derechos humanos; Álvarez Michaus con el arraigo domiciliario; Salvador Dávila con los servicios periciales, claves en los Juicios Orales; Marco Arturo Delgado, sobre el robo de vehículos y el abigeato; el priísta Enrique Juárez Ramírez iría al grano al preguntarle al General Eddy sobre el déficit de policías: “¿Cuánta gente necesita?” .
Hay mil 982 policías en total, 424 de ellos estatales, por lo que se necesitan dos mil 470 más, diría el General, a quien no le quedaría clara después la pregunta de la priísta Norma Guel, sobre los reintegros presupuestarios; “no manejamos recursos. Si nos dan dinero, trabajamos; si no nos dan dinero, también trabajamos”, diría.
El procurador Felipe Muñoz Vázquez también contestó todo lo que se le preguntó. En un imaginario “enfasímetro” -algo para medir el énfasis- sus comentarios en la defensa de la dependencia a su cargo fueron mejor articulados y en otros temas ofreció datos nunca antes revelados a la prensa, que ayudan a comprender mejor la eficiencia de esa Procuraduría.
Por ejemplo, admitió el grave problema del robo a casas habitación y urgió a la población a tomar medidas de prevención; reconoció también lo costoso de las pruebas de ADN en los conflictos de paternidad, de unos doce mil pesos; y, a diferencia del General Eddy, quien había sugerido a los legisladores que le preguntaran al procurador sobre las estadísticas de seguridad, Muñoz Vázquez dijo que el acotamiento a la delincuencia no se logra con la compra de armamento, sino en el diseño de estrategias de inteligencia y trabajo de gabinete; “no hemos invertido un solo peso en comprar armas”, es decir, se puede hacer más con inteligencia que con dinero.
Las comparecencias en materia de seguridad pública son documentos de políticas públicas imperdibles, que sin embargo llegarían a su fin; luego de lo cual la sesión del Congreso del Estado continuó con el nombramiento de representantes ante una treintena de dependencias públicas y la entrada de un proyecto de dictamen del grupo parlamentario de Acción Nacional, sobre reformas a la Constitución local en torno a los periodos ordinarios de sesiones.
Foto: Gilberto Barrón