Bajo fuego. “Intensa actividad se ha registrado en el Congreso del Estado”, dice el boletín de prensa emitido por la LXII Legislatura, cuya área de comunicación social fue visitada la mañana de ayer por el reportero de La Jornada Aguascalientes en busca de novedades y nada le informaron, y es que más mal que bien, estos legisladores han dejado a un lado lo importante por lo urgente, tienen el compromiso tatuado en la frente de quedar bien con el Gobierno Federal, les espanta no haber llegado a tiempo para ser la entidad bisagra para la aprobación de la Reforma Energética de Enrique Peña Nieto.
Lo que intentan los legisladores locales es darle prisa a los trámites que vienen desde la capital, como si con la venia de su voto, pudieran poner mejor a Carlos Lozano de la Torre, cuando lo cierto es que el gobernador sigue su propio caminito para hacer migas con la administración federal. Así que una vez acabado el trámite de aprobar en fast track la Reforma Energética, lo que sigue es atender los asuntos locales, así que el día de hoy estaremos presenciando a partir de las 11:00 horas es la aprobación del Paquete Económico en los términos en que el gobierno estatal requiere.
Hoy de nueva cuenta, vamos a presenciar lo verdes que están los legisladores, y en esta ocasión no nos referimos a la bancada mixta y la jumentud de la mayoría de sus integrantes, sino a la oposición, o lo que debería serla. Sin mucho esfuerzo, podemos augurar que la voz cantante del desacuerdo en el Congreso la llevarán las panistas Sylvia Garfias y Martha Márquez Alvarado, hasta el momento, las únicas legisladoras que más o menos han entendido de qué se trata su labor como diputadas, es decir, ante el agandalle del priísmo en todas las comisiones, lo único que resta es hacer un poco de ruido a la hora de la votación. Si la jugada de la mancuerna Jorge Varona-María de los Ángeles Aguilera ha sido colocar tres diputados “afines” en cada comisión, a fin de que los mirones sean de palo, el único camino que tiene la oposición de manifestarse es la de hacer ruido durante las votaciones.
Sobre el asunto de hacer ruido hay visiones encontradas, pues a las legisladoras panistas las han dejado solas al momento de intervenir en la discusión. Cualquier comentario que pudiéramos hacer sobre el desempeño de estas legisladoras podría ser considerado machista, pues al final no podemos dejar de ligarlas con las carreras políticas de Fernando Herrera y Martín Orozco, pero más allá del grupo que representan, del interés que mueve sus participaciones, Garfias y Márquez han sido hasta el momento lo más interesante del Congreso.
Mucho tiene que ver la calma chicha que se vive en Acción Nacional y el acecho en que tiene a ese partido la difusión de la segunda parte del gabinete de Antonio Martín del Campo, como las cartas ya están echadas para Jorge López Martín, los fantásticos, zombis, espartanos y demás bestezuelas blaquiazules apenas y se dignan promover (poco sutiles) a sus Jaime Gallo y Manuel Cortina para la dirigencia estatal. Es tal el pasmo que provoca en el panismo la designación de su líder estatal que ese estate quieto se está reflejando en el cuidado con que se mueven Adolfo Suárez y Ulises Ruiz Esparza en el Congreso. El primero sigue pecando de precavido, no le acaba de caer el veinte de que es el comandante en jefe de la oposición en Aguascalientes, mientras que el segundo sabe perfectamente que es considerado la “materia gris” en el parlamento local, así que se guarda para la presentación de las iniciativas que tanto han anunciado por debajo de la mesa… sin embargo, esta precaución de las cabezas evidentes del panismo, al final puede resultar contraproducente si permiten que la bancada mixta sea la que marque el paso en los asuntos importantes para el gobierno estatal.
Hasta el momento, la estrategia de Jorge Varona Rodríguez ha sido dejar que la oposición se evidencie por sí misma, si no saben negociar, si no saben plantear lo que realmente quieren… pues allá ellos, se la ponen más fácil al PRI-Verde. Mientras que para la oposición de “izquierda” (sí, entre comillas) este esquema de trabajo en que solitos se dan a conocer, ha sido sumamente efectivo, pues más allá del ruido que pudieron hacer al momento de la aprobación de la minuta de la Reforma Energética, lo que se ha visto del PRD, PT y Movimiento Ciudadano, es que aún no les cae el veinte de qué papel tienen que jugar.
A la enormísima bancada de dos (histórica, dijeron en algún comunicado de prensa) que tiene el de la Revolución Democrática le pesa muchísimo la coalición Unidos por ti, no acaban de entender Cuauhtémoc Escobedo Tejada y Marco Arturo Delgado Martín del Campo que no representan las negociaciones que el partido pueda tener con el gobierno, así que han dejado pasar la oportunidad de estar en tribuna para, solamente, manifestarse como se esperaba que hicieran. Si Escobedo Tejada se preocupara menos por lo que hace su pupilo Óscar Estrada en la dirigencia estatal del sol azteca y se abocara de lleno a debatir en comisiones, otro gallo le cantaría al PRD en el Congreso.
Mismo caso para los diputados del Partido del Trabajo y Movimiento Ciudadano, en el caso de Oswaldo Rodríguez ha resultado evidente que le faltó tiempo para prepararse, se le nota abrumado, sin brújula, si su partido sufre una crisis de identidad, su representante en la LXII Legislatura es el vivo ejemplo. Es el tiro suelto del que no se sabe qué esperar. Quizá, sólo quizá, se pueda componer cuando el resto de los miembros de Movimiento Ciudadano se integre a las administraciones municipales, pero eso es sólo un buen deseo, pues a Oswaldo Rodríguez bien le podría decir Dante Delgado que se pusiera las pilas.
Si ayer comentábamos entre elogios la participación del senador panista Javier Corral y subrayábamos la parte de su discurso en el que enaltecía la prudencia entre los valores que debe tener un legislador, en el caso del Partido del Trabajo y Jesús Rangel de Lira no podemos decir lo mismo. Sí, el diputado del PT es de los pocos fogueados en las lides de la administración pública, de los contados que sabe qué es lo que quiere para el futuro, sin embargo, ante la aplanadora de la bancada mixta, el pasmo de la diputación panista y la dispersión del PRD-MC, quién sabe cómo le vaya a salir el plan de ir presentando pequeñas iniciativas a las que nadie puede negarse, como es el plan de Rangel de Lira, no es que queramos ver sangre en el Congreso, pero sí es necesario algo de acción, sobre todo a la hora de argumentar.
Oportunidades para que los legisladores de oposición se comporten como tales, sobran; no compartimos la visión de Adolfo Suárez de apostar que la Reforma Político-Electoral va a ayudar a mejorar la imagen de los legisladores, creemos que su chamba está en comportarse como representantes de las minorías que sumadas forman un bloque que no cree que Aguascalientes es territorio 100% priísta; que a través de pequeños gestos hacia la sociedad podrían modificar la percepción que de los legisladores se tienen.
Más directo no se puede, ¿cuánto cuesta un diputado local?, sacamos cuentas y más o menos son 800 mil pesos que mensualmente tenemos que erogar en ellos. Lo que a los medios nos corresponde es confirmar esa cifra con la administración que encabeza Norma Guel y con el secretario general, Miguel Ángel Nájera Herrera. Ya confirmaremos si es cierto que ganan más de 100 mil pesos de sueldo y dieta, más de 20 mil de gestión social y cifra similar para comisiones; más de 100 mil en el módulo de atención con más de 40 mil de mantenimiento y 60 mil de sueldo a personal… Súmele. Lo que a la oposición le corresponde, creemos, es usar la rendición de cuentas, aprovechar la sed de información que se tiene sobre sus gastos para congraciarse con la población.
La del estribo. Llegamos al límite de la plana, se nos quedan preguntas en el tintero, hoy tendrán en la sesión del Congreso la oportunidad de dar un paso adelante… o no.
@PurisimaGrilla