- El DIF estatal ha dado seguimiento a los casos, todos dicen estudiar y no correr riesgo
- En tres años sólo se ha registrado un caso de retiro de niño por las condiciones tan graves en las que se encontraba
El Centro Histórico de la ciudad y la conocida Expoplaza son las zonas en donde mayor presencia de niños trabajadores hay, por parte del DIF estatal. Marcela Durán, directora de éste órgano, indicó que la principal acción que realizan es investigar si el niño tiene o no familia y en qué condiciones vive, ya que no se tiene facultad alguna de llegar y retirarlo del espacio sin antes una orden legal.
Hasta el momento se tienen registrados alrededor de 400 niños dentro del programa de trabajo infantil; con el cual se lleva a cabo todo un proceso de investigación con la finalidad de controlar que el niño no esté en riesgo, es decir, que no haga trabajos que lo puedan afectar física o sicológicamente ya que hay casos en donde niños de menos de diez años venden chicles, flores o dulces a altas horas de la noche.
Según el registro del DIF estatal la mayoría de estos niños trabajadores se encuentran estudiando y sólo ayudan a sus padres a trabajar en horas no clase, “todo está bajo control tenemos el conocimiento de sus familias y su situación”; en un inicio cuando se detecta a alguno que no estudia, la mayoría de los tutores acceden de forma inmediata a meterlos a algún centro educativo mientras no deje de trabajar.
En primera instancia una trabajadora social busca a los niños y a sus familiares con quienes conversan durante un periodo específico, según sea el caso, ya que como órgano dependiente de gobierno no puede obligarlos a que no trabajen mientras se encuentra en las medidas preventivas establecidas en la normatividad del DIF.
“En muchos de los casos logramos cambios y mejoras en la vida del niño con el programa de trabajo infantil pero hay casos excepcionales”, en los cuales se han tenido que retirar por un tiempo al menor de su familia aunque después de todo un proceso de pláticas, capacitaciones y en ocasiones apoyos extraordinarios como despensas o materiales se consigue mejorar la calidad de vida y se les regresa al niño, “en todos los casos damos seguimiento con visitas ocasionales”.
Aunque debido a la extrema pobreza en la cual se vive en muchas de las familias aguascalentenses no han podido evitar que los hijos no trabajen, por ello la directora del DIF estatal recordó tener varios filtros con los cuales se lleva el control preventivo antes mencionado para evitar que la vida de algún niño corra riesgo.
En los tres años que lleva la actual administración estatal el DIF ha tenido un solo caso de retiro de niño definitivo al cual por la situación tan grave que presentaba y después del proceso legal correspondiente, resultó más benéfico para el niño estar con otra familia y no con la natural.
Foto: Gerardo González