Hace unos ayeres desde esta redacción apostábamos que para coordinar a la bancada panista uno de los nombres que sonaba fuerte era el de Sylvia Garfias, no porque nos vinieran a contar los de Acción Nacional o porque pensáramos que se podía incidir en la decisión de los panistas, indicar que era viable que encabezara al grupo parlamentario respondía al análisis del perfil de la comunicadora; de quien si algo se puede decir de su carrera política es que se ha forjado, siempre, desde la oposición; los blanquiazules al final, optaron por dejar las riendas en manos de Adolfo Suárez Ramírez, quien hasta el momento ha sido bastante cauto, por no decir inocuo.
Quizá, sólo quizá, nos estamos dejando llevar por la impresión que nos dejó el paso de la aplanadora priísta en el reparto del botín del Congreso, que si bien ya sabíamos, no deja de llamar la atención la mancuerna que han logrado Jorge Varona Rodríguez y María de los Ángeles Aguilera, sobre todo porque previo a la instalación del Congreso, se disputaban el liderazgo del grupo parlamentario mixto, pero ya en su respectiva curul y repartidos los ámbitos de influencia, han mostrado el lado más duro del Revolucionario Institucional.
No se lo esperaba Acción Nacional y quizá por eso desecharon un perfil como el que se necesita para subir a tribuna y, como hizo ayer Sylvia Garfias, darle en donde más le duele a los del tricolor, condicionarles todo, en este caso, la aprobación del Paquete Económico a una glosa del Informe de Gobierno de Carlos Lozano de la Torre; movimiento inesperado, pues saben los del PAN que poco podrán a la hora de las votaciones, entonces, lo que hay que dificultar es el momento de los mayoriteos, aplazarlo lo más posible y volver una y otra vez a la discusión.
La movida de los azules, a través de la intervención de Garfias Cedillo en tribuna, responde a que ahora se dan cuenta que van solos, su aliado en las elecciones, el PRD, hasta el momento sólo ha sido comparsa del grupo parlamentario mixto, Cuauhtémoc Escobedo Tejada, líder del par de diputados del sol azteca, se ha visto muy activo en la justificación de las movidas del PRI, y presumiendo un tono conciliador (algo así como: quiero ser Gilberto Carlos Ornelas, pero no me alcanza) suavemente se ha alejado de la alianza con los panistas. ¿Les saldrá a los de Acción Nacional?, por lo pronto sí, ayer, nomás no le pudieron dar respuesta a la batería de cuestionamientos que dio la diputada y quienes participaron prefirieron aplazar la discusión para un momento mejor (Norma Guel Saldívar) o pretextando que no había que partidizar los asuntos (Eduardo Rocha Álvarez), que más bien sonó a un irremediable “en la cara no, pégame, pero en la cara no”.
Ya puso las ficha en la mesa el PAN, pero responsabilizamos del movimiento a Sylvia Garfias porque los panistas están, siempre, pensando en otra cosa, pareciera que no pueden ser multitareas y lo que los tiene con el alma en un hilo es qué van a hacer con la dirigencia estatal del partido, nomás no saben a quién poner de sucesor de Jorge López, y están muy ocupados peleándose la silla.
Ya sabe usted que, apoyado por los Felipe González, Jaime Gallo quiere quedarse con el CDE panista, la apuesta es tener el poder de decisión para las elecciones del 2015 y 2016, de hecho, eso es lo que todos quieren, nomás que los González González y González Ramírez donde han comenzado a moverse es en los municipios, en especial en Calvillo y Jesús María, donde Javier Luévano y Antonio Arámbula, los próximos presidentes municipales, más bien han dejado a un lado los asuntos partidistas para avocarse a las tareas del cambio de estafeta. Ambos panistas se las han visto negras con quienes van a suplir.
En Jesús María, Antonio Arámbula ha tenido que sortear desde ahora, las deudas y problemas que le va a dejar Martín Chávez del Bosque, quien ya se aburrió de estar en la presidencia municipal y adelantándose a que por su desempeño no tendrá fácil el salto a algún otro puesto donde pueda cobrar del erario público, se adelantó sus vacaciones y le ha dejado todo el paquete a su equipo de trabajo. Ya ni para las fotos “bonitas” se aparece Chávez del Bosque, mucho menos para atender el creciente problema de la recolección de basura o el vandalismo que sufren las instalaciones de agua potable… dicen que el señor ya anda buscando a sus compañeros de tuna en la Autónoma, que porque sólo ahí volverá a llevar la voz cantante.
En Calvillo las cosas no van más fáciles para Javier Luévano, fue de los municipios en que los priístas se tardaron más en reconocer que no supieron hacer campaña y que en las elecciones perdieron todo el empuje; eso retardó la conformación de los equipos de transición, bueno, eso retrasó que Jorge Martínez Villalobos se hiciera a la idea de que ya no va a ser más el alcalde, y para acabar de sumar a los errores, le dejan al panista el problema eterno en el municipio de la guayaba: las quejas y demandas del personal de confianza con que cada administración engorda la burocracia municipal y que ya se saben el caminito, durante tres años hacen como que trabajan, firman un contrato temporal, y cuando cambia el gobierno, sacan raja de las lagunas legales para pedir su finiquito. Como siempre, tendrá que entrar al rescate el gobierno estatal.
De regreso al CEN panista, como es casi seguro que Jorge López Martín se una al equipo de Antonio Martín del Campo al frente de Servicios Públicos y ante el embate de los Felipe González para hacerse del edificio de Independencia; otros grupos ya están pensando en llamar refuerzos y se apuesta a que quien puede entrarle al quite es Manuel Cortina, para así ir amarrando los acuerdos necesarios para que Jorge López sean candidato a diputado federal y Martín Orozco Sandoval, quien enfrente a Lorena Martínez en la próxima elección a gobernador; que conste que no dijimos que al próximo candidato del PRI… eso lo decidirá Carlos Lozano de la Torre y, en este momento, no es algo que le ocupe.
Así las cosas, con los panistas distraídos en todo y con la atención en nada, habrá que seguir con detenimiento los pasos de Sylvia Garfias en el Congreso, no porque pertenezca al grupo de Fernando Herrera, sino porque puede ser los cimientos para una carrera política propia que le lleve a disputar la candidatura a la alcaldía a Teresa Jiménez… ahí nomás.
La del estribo. Nosotros cumplimos cinco años, el domingo 1 de diciembre será ya un quinquenio en que, a pesar de que nos decían que no había espacio para otro periódico, apostamos a que era necesario que alguien dijera lo que otros dejaban de lado. La evaluación le corresponde a usted (elogio en boca propia es vituperio), nosotros queremos creer que vamos bien, porque usted está ahí, del otro lado, leyéndonos y confiando en nosotros; por eso: gracias, muchísimas gracias. Quienes elaboramos esta columna, quienes formamos parte de La Jornada Aguascalientes festejamos todos los días su lectura.
@PurisimaGrilla