- Josué Francisco Gutiérrez Márquez se llevó el segundo lugar por su obra Fross, con 15 mil pesos
- Los cuatro trabajos premiados serán publicados en un solo libro antes de que culmine el año
Con el apoyo del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta), el pasado mes de junio se lanzó la convocatoria por parte del Instituto Municipal Aguascalentense para la Cultura (IMAC) al Primer Premio Barrio Joven de Literatura 2013, con el objetivo de incentivar la creación literaria en jóvenes de 15 a 23 años de toda la ciudad.
Los participantes debían describir de forma original e ingeniosa, su identidad particular, generacional o social, a través de cualquier género narrativo ya sea por ensayo, cuento o novela.
Al cerrar la convocatoria se recibieron 25 trabajos en total, de diferentes partes de la ciudad, con una gran variedad de edades. Éstos fueron analizados por los jueces Rocío Castro, Antonio Guerrero y Renata Armas, quienes por unanimidad otorgaron el primer lugar al texto Retrato de Familia, de Claudia Alejandra Delgado Galván, y a Josué Francisco Gutiérrez Márquez el segundo lugar por su obra Fross.
Debido a la calidad que encontraron en los trabajos restantes, determinaron que Una vida normal de Ana Carolina Cuadra Moreno y Falsificaciones de Juan Francisco Camacho obtuvieran mención honorífica por la factura y la fotografía que hacían del momento de la edad, los valores y trabajos implacablemente escritos.
Antonio Guerrero se percató de un gran compromiso de los jóvenes con sus propias vidas, ya que “para escribir hay que leer y me demostraron que leen mucho”, pues las ideas pueden estar siempre en la cabeza, pero no cualquiera puede atraparlas en un texto bien escrito, con claridad, lucidez, entendimiento y sobre todo que cause sentimientos en el lector.
Los parámetros de calificación fueron basados en la estructura, enfocándose en el barrio como concepto de identidad de sus orígenes, siendo ya no sólo como estructura urbana, sino del espacio, en donde surgen las raíces y forjan las identidades de las personas.
Uno de los puntos más tocados en la mayoría de los trabajos fue el tema del suicidio, los medios de comunicación y de cómo están vinculados con los jóvenes y su alrededor, así como la idea de las adicciones, pero fuera de estar anestesiados, tuvieron la conciencia de la destrucción personal que este fenómeno provoca.
Ambos trabajos ganadores tuvieron una crítica constructiva por parte de los jueces, quienes destacaron una gran habilidad en el uso de la palabra para representar casi visualmente la historia narrada.
“Esto es de gran interés, ojalá que las administraciones siguientes sigan con este proyecto, porque es una manera de darles voz a los jóvenes”, sector que según la poeta Renata Armas, había estado olvidado por mucho tiempo, siendo que para muchos especialistas y maestros de letras “las artes no están peleadas con el conocimiento”.
Posterior a la entrega de reconocimientos y premios económicos (primer lugar 30 mil pesos, segundo lugar 15 mil pesos), Evangelina Terán, directora del IMAC, recordó la importancia que tiene la cultura en la sociedad, pero sobre todo en los niños y jóvenes, además anunció que las obras ganadoras y las dos menciones honoríficas serán publicada en un mismo texto, antes de que finalice el año.