He de reconocer que la modestia periodística es una prenda guardada en el ropero de la abuela, porque después de abandonar los juveniles años, me di cuenta que la lucha en este mundo de los vivos está pintada con los colores de la envidia.
Para hacer frente a esa pelusa, un día tomé la sana decisión de blindar la pequeña parcela de vanidad que poseo, al tenor de mi reflexión parroquial: “Siempre habla bien de ti, que para eso no están los demás”.
La confesión viene a cuento porque el Vale al Paraíso (“Otra vergüenza para Aguascalientes”) del domingo 29 de marzo de 2009, fue el único espacio periodístico en Aguascalientes que reprodujo casi íntegro el reportaje publicado en La afición, el suplemento deportivo de Milenio Diario (17-18/03/ 09); hoy cito aquel texto por estar vigente el tema:
La noche anterior, el 16 de junio, el periodista Rafael Ocampo anticipó en Milenio Televisión la portada del día siguiente: “Falsificación de firmas, presunto fraude en la compra de jugadores y otros manejos irregulares fueron cometidos por la administración del club, que hoy está cerca del descenso”.
En la página 4, la cabeza de la nota develó: “El lado oscuro del Necaxa”, (primera parte de dos partes firmadas por el reportero Ricardo Magallán); “El titubeante paso del Necaxa en lo deportivo, ése que lo tiene al borde del descenso, bien podría ser sólo el reflejo de los malos manejos que ha realizado la administración del club de Aguascalientes en años pasados.
“La afición cuenta en su poder con documentos que exhiben manejos turbios durante la administración en que Javier Ramírez Isunza (recientemente nombrado Notario Público por el gobernador Luis Armando Reynoso Femat, agrego) y Alejandro Bocardo, principales implicados en los actos que se documentarán, fungían como vicepresidentes del cuadro de Aguascalientes” y estaban “encargados de hacer las negociaciones con los jugadores y realizar las contrataciones para el equipo”, ilustra la nota.
El tema central del golazo periodístico es la compra de un futbolista que se concretó “con la falsificación de una firma, supuestamente realizada por Javier Ramírez Isunza”, según los resultados arrojados por la prueba pericial de grafoscopía realizada en Cancún.
Al pie de los documentos exhibidos por el diario defeño se lee: “El convenio entre clubes. Es a través de un convenio deportivo entre el Necaxa y la Liga Deportiva Alajuelense de Costa Rica como se llega al acuerdo de que el club mexicano adquiere el 50 por ciento de los derechos del jugador Pablo Gabas en 200 mil dólares.
“Firma falsa y precio alto. En el contrato entre el club Necaxa y la empresa Hazle de México, el 50 por ciento de los derechos de Pablo Gabas son tasados en 450 mil dólares más que en el ex club del jugador, Liga Alajuelense, y la firma que aparece del entonces presidente de los Rayos, Marco Antonio de Alba, nunca es reconocida por él y se confirma, a través de un peritaje, que es falsa.
“El peritaje. De acuerdo con un exhaustivo peritaje, un laboratorio, con sede en Cancún, Quintana Roo, determina que la firma que aparece en el contrato entre Necaxa y Hazle de México no fue hecha por Marco de Antonio Alba, como ahí supone, y confirma que es falsificada”.
Al día siguiente, el 18, se publica la segunda y última parte, también con llamada en portada: “Necaxa nos responde. El presidente Roberto Muñoz admite que el club pasa por penurias económicas, luego de malas administraciones”…
“Ellos (Ramírez Isunza y Bocardo) salieron en octubre, y fue cuando Televisa hizo la entrega. A mí me lo entregaron en diciembre. Lo que pasa es que toda la documentación contable de esa administración, pues ya no me tocó verla, ni tengo acceso a esa documentación, porque creo que aún están en el cierre de varias cosas”, entera Muñoz, a manera de deslinde.
En páginas interiores, el reportaje milenario agrega: “Relaciones peligrosas. El jugador chileno Sebastián Rocco, quien fue adquirido por el Necaxa en el 2007, no ha jugado todavía en México, pero su promotor fue arrestado por estar relacionado con el tráfico de drogas”.
Cuatro años después de publicado mi texto, el sábado reciente (29 de junio), el diario Reforma informa en la nota principal de su portada: Usan al Necaxa en lavado.-PGR. Desvía Reynoso Femat recursos vía equipo de futbol.
El ex Gobernador de Aguascalientes Luis Armando Reynoso Femat y su hijo Luis Armando Reynoso López habrían goleado las finanzas del Estado a través del equipo de futbol Rayos del Necaxa.
La Procuraduría General de la República (PGR) y autoridades fiscales de la Secretaría de Hacienda investigan el presunto enriquecimiento ilícito y lavado de dinero del ex Mandatario estatal y su hijo mediante el Patronato de Fomento al Futbol de Aguascalientes (PFFA)…
Durante la gestión de Reynoso Femat, el Gobierno del Estado transfirió recursos millonarios al PFFA para pagar el funcionamiento de los Rayos. Las líneas de investigación señalan que Reynoso López y una red de ex funcionarios estatales adquirieron, con recursos públicos y de manera irregular, las cartas de jugadores de futbol por las que luego cobraban al Necaxa montos millonarios que no se detallan en la investigación de la Procuraduría.
Entre los servidores implicados se encuentran Marco Antonio de Alba, ex director del Patronato de Fomento al Futbol de Aguascalientes, y Luis Fernando Loperena González, ex director del Estadio Victoria, casa de los Rayos…
Equipos vemos, lavaderos no sabemos.
Porque alguien tiene que escribirlo: Los rayos gubernamentales iluminarán el cielo del estadio Victoria, construido sobre las ruinas del antiguo estadio municipal, propiedad de usted.