El Programa de FOTO RADAR ciertamente hiere los bolsillos de quienes como yo, hemos manejado distraídos y nos descontrolamos en algunos tramos de la Ciudad. Nos hiere porque al subirnos a nuestros autos perdemos la dimensión de la seguridad del Peatón, y sin darnos cuenta nos transformamos en agresores y potenciales homicidas. Nos hiere que nos multen. Pero nos hiere mucho más que no tengamos posibilidad de “negociar” ni podamos “mocharnos” con algún corrupto agente de Tránsito. Ahora extrañamos al agente de tránsito que podíamos sobornar con un billete de baja denominación, o “charolear”. Nos hiere que la tecnología esté al servicio de la Ley. Y nos hiere doblemente pues no aceptamos que un robot “nos caiga en la movida”. Posiblemente por esas heridas, algunos “abusadillos” promueven el comité de la “venganza” en contra de un gobierno que decidió poner en primer lugar el bien común de la sociedad.
No estaría de más, el hacer un llamado a los candidatos y partidos, para que sus campañas se sustenten en la defensa y la propuesta de políticas públicas orientadas al bien común. Actuar con demagogia y hacer eco de las malas conductas de irresponsables conductores que violan la Ley y quieren convertir a la ciudad de Aguascalientes en una selva de concreto me parece un contrasentido de la política.
El gobierno municipal de Aguascalientes, a cargo de la Alcaldesa Lorena Martínez Rodríguez, ha privilegiado las políticas públicas orientadas al bien común y la seguridad general de los ciudadanos. Aun a costa de su popularidad, ella decidió mantener la operación del programa de control de vialidad mejor conocido como FOTO RADAR. Colocar el bien común por encima de la coyuntura electoral que concluirá el 7 de Julio, le ha costado a Lorena una buena cantidad de puntos de popularidad política. Hace unos días, la Alcaldesa de Aguascalientes, declaró lo siguiente a los medios de información:
“Resulta complicado implementar políticas públicas que favorezcan al respeto a la ley, a reducir el número de accidentes, a seguir salvando vidas, a fomentar una relación armónica en una comunidad, pero creo que la ciudadanía es la que debe de valorar este tipo de propuestas; por ejemplo, si nos vamos con la demagogia fácil de pretender complacer a todo mundo, o bien, si asumimos la responsabilidad de implementar políticas que salven vidas. Diversos estudios de opinión señalan que alrededor del 70% de los ciudadanos de Aguascalientes están de acuerdo con el programa del FOTO-RADAR, desafortunadamente siempre habrá ciudadanos a quienes no le guste respetar la ley”.
El conflicto es coyuntural y electorero. Algunos estrategas especializados en campañas negras, han recomendado a candidatos de diversos partidos, promover el rechazo al Programa FOTO RADAR. Por supuesto que tal acción ha tenido eco en algún sector de ciudadanos que gustan de conducir a altas velocidades por todas las calles de la Ciudad, y potenciales violadores de la Ley que deciden no observar los reglamentos de tránsito. ¡Qué idea tan genial! Sustentar una campaña política promoviendo la desobediencia a las leyes.
Ciertamente algunos candidatos a la presidencia municipal de Aguascalientes han caído en una trampa, que les ofrece votos de esa franja de ciudadanos que gustan de violar la Ley. Al caer en trampa de una campaña negra, esos candidatos se colocan del lado de los infractores de la Ley. Y vemos potenciales gobernantes que se transforman desde ahora en potenciales violadores de nuestras leyes. ¿Qué no harán una vez sentados en la Silla Presidencial?
El 7 de Julio, una mayoría de los ciudadanos queremos elegir un cuerpo edilicio que garantice el respeto a la Legalidad; que nos ofrezca soluciones a la Inseguridad; y que fomente la construcción de una sociedad que respete las reglas mínimas de convivencia. Son muy pocos quienes buscan elegir Alcaldes que apoyen a delincuentes potenciales. Conducir a exceso de velocidad equivale a portar un arma capaz de quitar la vida a otros, y también sirve para amenazar a todas las personas que lo rodean.
Hay niveles señores candidatos. Abandonen la demagogia que tanto daño causa a nuestra Ciudad. Aguascalientes merece respeto.
