- A causa del botadero de tapas del alcantarillado, CAASA y Protección Civil reemplazan algunas que estaban perdidas
- La basura orgánica es de las problemáticas mayores en las cañerías
Con el inicio de la temporada de lluvias, la ciudad de Aguascalientes comienza a inundarse y a tener conflictos materiales y de salud. Con relación a esto, Gabino Vázquez Vega, director de Protección Civil, Atención Prehospitalaria y Bomberos Municipal, destacó haberse tenido complicaciones y obstrucciones de drenaje en diferentes puntos de la ciudad durante la semana pasada, como consecuencia de una importante caída de lluvia.
Por ello se ha estado trabajando en coordinación con CAASA para hacer desazolves, como en el caso de acumulación de gas metano. Otro problema que se registró fue el botadero de las tapas de las alcantarillas, y ya que algunas de ellas no lograron encontrarse, se tuvo que hacer un reemplazo para evitar riesgos a la población por la abertura de la cañería.
“En coordinación con Obras Públicas se hizo y se continúa haciendo una labor de limpieza de arrastres de materiales”, tales como arena, piedra, grava o tierra.
Uno de los puntos de conflicto de mayor riesgo está ubicado en el arroyo que corre al bordo de la colonia Santa Elena, atrás de los Pericos, hasta el parque México, pues es ahí donde confluyen varias corrientes agua del fraccionamiento Pintores Mexicanos y Cumbres, con las cuales al momento de lluvia llegan a inundar la zona por desazolves de las cañerías.
Adicional al trabajo en equipo, se continúa al interior de la dirección una alerta permanente en todos los equipos de bombeo para apoyar a la población, “contamos con motosierras para situaciones de riesgo”, ya que luego se da la lluvia con aire y hay caída de árboles que obstruyen las vías, sobre todo junto con el área de Parques y Jardines para la poda o retiro de árboles que ya representan un riesgo para al ciudadanía. Nos preparamos, pero esperamos que las lluvias continúen porque la realidad en la ciudad es que el histórico de precipitaciones nos da un balance más negativo hacia la sequía”.
Aunque el pronóstico dice que será un año normal, Vázquez Vega confesó que no bajan la guardia ante alguna contingencia, razón por la cual señaló contar con acuerdos desde el mes pasado, pues se dedicaron a enviar oficios a diferentes instancias, tanto municipales como estatales y federales, así como con el Ejército Mexicano, que en determinado momento podrá activar el Plan DN-III para actuar junto con esta dirección municipal.
Existe también un comité de abasto que está presidido por la delegación estatal de la Secretaría de Economía, donde ya se tuvieron reuniones para que en caso de alguna fatalidad natural, se pueda responder tanto con alimentos como con vivienda y emergencias médicas.
Los puntos identificados de inundación en la ciudad son varios, pero los principales tiene que ver con lugares donde antiguamente se tenían arroyos o cauces naturales, como Villas de Nuestra Señora de la Asunción, Talamantes Ponce, avenida López Mateos de la parte centro, avenida Aguascalientes y Arqueros en la zona sur, así como también avenida Siglo XXI y Mariano Escobedo, “algunos pasos a desnivel, como Gabriela Mistral nos dan problemas en ocasiones”.
En algunos de estos lugares se hicieron obras pluviales, sin embargo, lo que afecta más en esta temporada es la basura, no tanto la urbana, sino la orgánica, es decir, las hojas de los árboles, sobre todo en José María Chávez, “a la hora de la lluvia, tenemos que correr a limpiar las entradas del drenaje pluvial” para que sin mayor problema transcurra el agua. En total, la Dirección cuenta con 168 elementos diferidos en los tres turnos, en tanto son 55 elementos por turno por las tres áreas.
Foto: Archivo LJA