- Necesario indagar si choque de costumbres provoca suicidios, alcoholismo y madres solteras
- A mayores niveles de prohibición mayor necesidad de desahogo: Juan Bobadilla
“Si nos ponemos a ver la Feria se supone que originalmente está fundamentada en una festividad religiosa, en San Marcos. Ahorita lo que acaba siendo es un rito 100 por ciento pagano”. Tras esta reflexión Juan Bobadilla Domínguez, profesor investigador de la Universidad Autónoma de Aguascalientes, anotó que desde tiempos inmemoriales las sociedades han optado por momentos de “permisión” durante los cuales desahogar los deseos negados por el costumbrismo.
“La sociedad hasta cierto punto ha estado determinada y dictaminada a que tiene que ser conservadora, tradicional. Cuando se está encajonado en ese estadio, es tremendamente opresivo, no se puede vivir así”.
La catarsis, indicó el especialista en temas de diversidad sexual, en determinado fue adoptada como sano método de escape. En la localidad tal evento sería la Feria Nacional de San Marcos, celebrada cada año en las inmediaciones del barrio del mismo nombre.
“Es esa oportunidad de permisión para decirle a la sociedad misma: eres tradicional, conservadora, pero te voy a dar cuatro semanas para que puedas hacer lo que gustes y mandes y no va a haber problema, porque después vamos a regresar al redil”.
Este fenómeno, mismo que dio origen al carnaval, dijo, no es privativo de Aguascalientes. Tal clase de eventos son antiquísimos y acontecen a nivel mundial: “estos famosos matrimonios de parejas swinger, que se cree que es algo que empezó con la revolución sexual en los 60, para nada. Datan de aquella época, en las aldeas de vikingos toda una semana había intercambio de parejas, eran unas bacanales tremendas y eran ritos completamente paganos, obviamente”.
De igual forma Bobadilla, anotó en entrevista que la mezcla de comportamientos en cada sociedad siempre resulta rica.
Manifestó además que en México “no podemos hablar de una evangelización realmente, yo nunca lo he considerado. Siempre hemos tenido una mezcla de paganismo con cristianismo primitivo que ha dado como resultado un sincretismo muy curioso, muy interesante. Yo creo que la Feria funciona así”.
Al declarar que la catarsis resulta necesaria para toda sociedad, señaló que a mayores niveles de opresión religiosa o política mayor es el requerimiento de desahogo.
– ¿Aquí podría verse la particularidad de Aguascalientes, con la Feria más grande del país?
– Sería propicio hacer un análisis profundo en ese sentido. Ésa podría ser una hipótesis importante para trabajar: qué tanto va creciendo la Feria en función de las necesidades catárticas que la sociedad va teniendo por toda una serie de cosas, saber cómo se está pudiendo o no negociar esta cuestión de la tensión entre lo tradicional y lo moderno, que finalmente es el problema de fondo.
Desentrañar el tema, añadió Juan Bobadilla, también podría dar un norte en conflictos graves como lo son los suicidios que constantemente se presentan en el estado.
“A la sociedad en algunos sectores, en algunos grupos concretos, le está resultando muy difícil o tiene una imposibilidad para saber cómo pensar, cómo vivir, cómo guiarse y conducirse en torno a efectuar esta negociación entre lo tradicional y lo moderno”.
Alrededor de dicha “hipótesis arriesgada”, indicó el investigador, se circunscriben otros problemas como el alto consumo de alcohol en adolescentes, alto índice de madres solteras, y elevados números en el renglón de los divorcios y la violencia intrafamiliar.
“Si nos ponemos a ver a los ojos el discurso oficial -esta serie de cosas- pareciera que no existe para el gobierno y para la política local… es esta mentalidad de avestruz”.
Foto: Gerardo González