- El panista propuso “extrañamiento” por rebeldía e incumplimiento del priísta
- Abogados se quejan que el procurador de Justicia, Felipe Muñoz, los trata mal
Alfredo Reyes Velázquez y Miguel Ángel Juárez Frías escenificaron ayer una trifulca parlamentaria al reñir en la sesión de la diputación permanente: aquél pidió sacarlo del diálogo de los diputados con la procuración de justicia y éste no halló cómo defenderse.
Dos inteligencias políticas muy distantes entre sí, se subieron al cuadrilátero legislativo con guantes de diferentes onzas, cuando Reyes Velázquez, coordinador del Grupo Parlamentario del Partido Acción Nacional, reclamó los obstáculos puestos por Juárez Frías, para que la Comisión de Justicia invite al procurador Felipe Muñoz Vázquez, para que explique por qué trata mal a la comunidad jurídica de Aguascalientes.
Todo empezó cuando el blanquiazul propuso un extrañamiento al priísta, “por rebeldía e incumplimiento”; por no cumplir con los acuerdos legislativos ofrecidos a asociaciones, colegios y barras de abogados que lo solicitan, “ante el mal trato que se les da en las agencias del Ministerio Público, a lo que se ha negado sistemáticamente Juárez Frías”.
Pidió que se releve a la Comisión de Justicia de esa encomienda y se cite a dialogar al procurador.
Gregorio Zamarripa atajó la embestida y pidió a las partes “ecuanimidad legislativa” cuando tocó la réplica a Miguel Ángel Juárez, quien nervioso, dijo: “simple y sencillamente… Hay a quienes les gusta estar en los medios”, e hizo en seguida un relato de las actividades de esa comisión, que Reyes calificaría después de “informe de labores”.
Juárez dijo no haberse equivocado en su actitud frente a ese tema –consultando un diccionario la etimología de la palabra “gestión”- la Comisión remitió al procurador el punto de acuerdo… “no se ha tratado de rebeldía… Más bien se trata de hacer presencia mediática”, argumentó Juárez Frías, quien ha tenido muchos enfrentamientos con los abogados locales, por el mismo tema.
Reyes Velázquez agradeció a Juárez Frías que se hubiera quedado a escuchar el extrañamiento –al llegar el priísta, el panista habría hecho notar su retardo- e insistió en que se cambie a la Comisión de Justicia, para que se invite al procurador de Justicia a platicar con los legisladores, “cosa que, además, el funcionario estatal ha aceptado gustoso”, resaltó.
Luego diría que Juárez Frías parece una instancia adicional a la Oficialía de Partes del Gobierno del Estado, porque pone obstáculos al diálogo de los representantes populares con sus autoridades; insistió en dejar sentado el extrañamiento “por rebeldía e incumplimiento” del diputado del PRI.
“‘No hay acomedido que no sea propositivo’, dicen ¿no?”, diría Zamarripa Delgado al proponer desechar el extrañamiento y turnarlo a la Comisión de Gobierno que él preside, para en su próxima sesión dirimir y zanjar el tema.
Esto será hoy mismo, este viernes. Así concluyó el sainete parlamentario, en el que “el diablo volvió a ganar… por diablo”.
Foto: Gilberto Barrón