Se ha puesto a pensar qué tan cierta es la información que consume de manera directa e indirecta todos los días, a qué medios se expone usted para adquirir dicha información, quién se lo dice y cómo se lo dice, el conflicto magisterial que padece la nación, ¿lo conocemos a profundidad o simplemente es la nota del día que, un (intento de) líder electrónico le quiere vender?
Revisando a Furio Colombo en su libro, Televisión, la realidad como espectáculo me encuentro y comparto el término de “Líder electrónico” el cual según el autor sustituye al líder natural a quien define como “la persona que aplica su poder y ejercita su carisma a partir de un grupo inmediato y físicamente verificable, sumando cualidades prácticas de acción”.
Es decir, su líder electrónico preferido no es una figura necesariamente carismática dentro del macrocosmos visivo y mucho menos cuenta con poder de convencimiento, se asemeja más a un lector de noticias que a otra cosa.
Colombo dice que el líder electrónico existe porque “la comunicación visiva lo consagra, lo difunde y garantiza el contacto. Y actúa fatalmente , tan sólo en el territorio visivo. Controla su base, transformándola en un ejército de comparsas. El líder electrónico no tiene un pueblo; tiene público, tiene espectadores.”
Eso quiere decir entonces que las noticias que difunden los medios electrónicos en especial la televisión y la radio (sean locales o nacionales) son ¿ficción pura? O es una mezcla entre tendencia mediática manipulada por los aparatos ideológicos del estado que encuentran en éstos la mejor herramienta para replicar su ideología.
Maximiliano Maza hace un apunte por demás interesante sobre el término no ficción, lo define como “todo aquello que proviene de la realidad y que se intenta reflejar de la manera más fiel posible”.
La frase me parece que tiene muchos matices, imagínense un país sumido en la violencia, sólo imagínenlo, ni se les ocurra experimentar vivir en él, donde los medios de información no aplican del todo la “no ficción” ni la objetividad, otra palabra clave que el Maestro Maza suelta para la reflexión, y entonces, consumimos y nos llenamos de “sí ficción”. Caray pareciera que es difícil narrar la realidad tal y como es, no lo sé…
Lo que sí sé es que la “no ficción” como tal no aplica en nuestro país, o díganme ustedes, ¿conocen algún medio electrónico que refleje la realidad lo más fiel posible?
Cada quien matiza como su línea editorial le dicta, y tal vez eso haga rico el discurso de cada medio en cuestión.
Puede ser el discurso utópico de los mandatarios del país, bueno de los mandatarios, de los que se dicen líderes de opinión y de todos aquéllos que quieren hacer cambiar la forma de pensar del respetable y se abanderan con la “no ficción”.
Esa ficción magisterial que hasta The Wall Street Journal aborda, aseverando que los maestros del estado de Guerrero están retando a la administración de Peña Nieto; la “no ficción” del rotativo identifica como desafiante las actividades de ese sector de la sociedad al cerrar escuelas, toma de calles y carreteras sosteniendo su desapruebo a las reformas educativas de México.
Ese hecho tan “cotidiano” ya para nosotros y subestimado en algunos casos por los medios, es identificado claramente por el rotativo norteamericano como un foco rojo en el capital político del mandatario mexicano (no ficción a los ojos de los gringos).
Será que la “no ficción” se perdió en la cotidianeidad, en el salón de preescolar y en el aula universitaria, en la casa con la familia y en el trabajo con los compañeros, no será que el verdadero problema que padecemos en este momento los mexicanos es la falta de “no ficción” al momento de comunicarnos, no sería más fácil, práctico y sobre todo sano hablar con el corazón y la “no ficción” en la mano.
Twitter: @ericazocar