Imprevisible, por decir lo menos el que Roberto Tavarez Medina se bajara de la contienda y dejara el camino libre a Francisco Javier Chávez Rangel y Óscar López Velarde Vega en la carrera por la candidatura del PRI a la alcaldía de Aguascalientes. Sí, a últimas fechas los columnistas mascota del Gobierno estatal habían estado ninguneando su candidatura, a pesar de que era evidente la inversión de recursos del aspirante lorenista no sólo en lonas y espectaculares, también en redes sociales.
Siguiendo una vieja costumbre a últimas fechas, las columnas amigas de la nómina gubernamental ya sólo mencionaban al ex titular del IEA y al ex secretario de la Seguot como candidatos, como si omitir a Tavarez Medina fuera un favor que después pudieran cobrar, como si negar su presencia borrara la campaña que hizo, de la que siempre dijimos que había que valorar que tenía sentido del humor; con la difusión de los dictámenes emitidos por la Comisión de Procesos Internos, que encabeza Alberto Solís Farías, sobre la elegibilidad de los 76 que solicitaron su registro el 23 de febrero, la contienda por la candidatura del PRI a la capital se torna, por decir lo menos, aburrida, pues es difícil negar que en la comparación y por las circunstancias, poco tiene que hacer Chávez Rangel ante López Velarde; así las cosas, se va un aspirante que, al menos, le ponía sazón al desabrido platillo de la selección tricolor, y al parecer se va bien, por lo menos en la comunicación oficial reconocen el que se haya bajado de la contienda como un acto de civilidad, madurez y lealtad.
Unidad y trabajo pavimentan el camino de la victoria, dicen también en el comunicado del PRI en el que se anunciaron los candidatos de unidad, lo que muestra que el regreso del nuevo tricolor es la vuelta a las viejas formas del partidazo. Resulta que así nomás, de los 76, se sacrificaron 40, ¿de veras?, ¿de un día para otro se dieron cuenta de que no la iban a hacer?, ¿cómo les cae ese veinte de que es mejor no ir en aras de la llevada y traída “unidad”?, si hubiera un poco de sinceridad en el proceso de selección lo que tendría que haber ocurrido es que se hicieran públicas las razones por las que se eliminaron a casi la mitad de los aspirantes, eso haría un partido moderno, comprometido con sus electores, en vez de acudir al silencio como forma de disciplina.
Pero nada de eso va a pasar, es decir, los eliminados, en nombre de la “unidad” acatarán el dedazo sin decir ni pío. Si los partidos, en este caso el PRI, en verdad estuviera comprometido con el reconocimiento al trabajo que hacen los suspirantes para ser seleccionados, si además confiara en su propio proceso de selección, quedaría claro que en el Distrito XIV se eligió a Normando López Meixueiro por encima de Ikuaclanetzi Cardona Luiz, por sus habilidades y no como un premio a la representación sindical sumisa que representa el precandidato; sería posible conocer, por ejemplo, cómo se valoró el trabajo de campo que realiza José Luis Proa y por qué vale menos que el priísmo súbito de Rafael Urzúa Macías para ir a pelear un distrito por tradición panista (el VI); igual, en el caso de quienes quedaron eliminados para ir por las presidencias municipales, siempre quedará la duda de si en Rincón de Romos jugó a favor de Manuel de Jesús Zamarripa Romero la maquinaria de la administración municipal y por eso se eliminó a Gilberto Luévano Contreras, o se “castigó” a los hermanos Benito y Nidia Acosta Lozano por apuntarse sin respeto alguno a la convocatoria.
Cierto es que en ninguna parte se promete sinceridad por parte del partido, ¿pero qué tal los aspirantes? Un repaso a lo que externaron la mayoría de quienes querían un cargo de representación popular permite ver que se comprometían con su posible electorado, que hablaban de honestidad y transparencia… pero sabemos que podemos esperar sentados, ninguno de los que quedaron fuera se atreverá a hacer alguna declaración, a cuestionar el procedimiento o por qué se ponen en duda sus capacidades y habilidades, callarán en redes sociales, disminuirán su presencia en Twitter y comidas en las colonias y fraccionamientos, porque son soldaditos disciplinados… lástima por ellos y por los ciudadanos, por ellos porque su silencio evidenciará la complicidad con las viejas formas, por los electores porque pierden una oportunidad de involucrarse con quienes los representarán.
Garbanzo de libra. Hasta el momento, de todos los aspirantes, sólo uno ha mostrado su inconformidad, el ya mencionado Gilberto Luévano Contreras, quien está convocando a rueda de prensa para dar a conocer cómo se rompió la mesa de diálogo entre los aspirantes de Rincón de Romo. Este aspirante denuncia que hubo evasivas del Comité Directivo Municipal para brindar la base de datos general de militantes y de los integrantes de sectores y organizaciones tricolores de aquel municipio. Además de acusar al presidente municipal de intervenir en el proceso. ¿Alguien más se apunta? Lo dudamos.
Así las cosas, las designaciones se seguirán prestando a cualquier tipo de especulación, por ejemplo, en el caso de los 14 distritos asignados, el grupo que se la debe a Carlos Lozano de la Torre, al menos en forma evidente, es mayoría, con cinco candidatos: Elsa Amabel Landín Olivares (V), Jesús Eduardo Rocha Álvarez (IX), María de Lourdes Dávila Castañeda (X), Álvaro Daniel Gallegos Macías (XI) y Normando López Meixueiro (el XIV); mientras que del grupo de Lorena Martínez, sólo son visibles tres posiciones: Luis Fernando Muñoz López (XII), José Enrique Juárez Ramírez (XIII), y en el Distrito XVI contamos como parte de este grupo a Norma Adela Guel Saldívar, porque, como ya le habíamos comentado, al final, todo queda en familia.
En esta ocasión tocó hablar del tricolor, pero ningún partido se salva, es decir, todos creen que transparentar los mecanismos de selección es malo para la vida interna de la organización, por eso una palabra como “negociación” tiene una connotación negativa. Ahí tiene, por ejemplo, que dentro de las mesas de negociación de la alianza entre PRD y PAN, ya es un hecho que los distritos VIII, IX y XVIII se los dejan a candidatos del sol azteca, o sea que es un hecho que sean para ellos, es decir, que ya la tienen en la bolsa Marco Arturo Delgado Martín del Campo, Jorge Etien Brand Romo y Martha Elena Bonilla Esparza.
Aunque, porque siempre hay un pero, la multiplicación de los candidatos en el PRD genera conflictos, como que entre las tribus se desconozcan, pues quienes quieren el amarrado XVIII dicen que nadie conoce a la única candidata registrada para ese distrito, que nadie sabe de dónde salió Martha Elena Bonilla Esparza, ándale, y ya le tienen amarrada la candidatura, ¿ahora qué van a hacer?
La del estribo. Ya que estamos con los perredistas, Gilberto Carlos Ornelas ya anunció que no buscará ningún cargo de elección este 7 de julio. Aparentemente encontró una oportunidad para desempeñarse como asesor del Comité Ejecutivo Nacional del PRD, dice que estará al servicio del partido “en lo que haya necesidad… Lo que puedo aportar es algo de experiencia acumulada, pero vamos a ver, todavía nos quedan unos meses; pero sí tenemos interés” de marchar a la Ciudad de México. Bon voyage diputado.
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