- “Emilio Chuayffet nos quiere desaparecer, hay que regresarlo a Arabia, pues de allá es”, propuso la líder del SNTE
- El objetivo fue demostrar al Gobierno Federal que el SNTE está en contra de cómo hizo su Reforma Educativa
Como última reunión de información con los trabajadores de la educación, Juana Alicia Espinosa de los Monteros, líder estatal del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), encabezó la reunión en el Auditorio de la Escuela Normal Superior Federal la tarde de ayer, con el objetivo de informar cómo quedó redactada la Reforma Educativa, en qué afecta y en qué no al magisterio, puesto que es un derecho de los mismos conocerla a fondo, “aunque la escribieron muy clarita, no tiene mucho que buscarle”, señaló la líder en entrevista.
La razón principal de dichas juntas iniciadas el 3 de enero recae en demostrar al Gobierno Federal que el SNTE está en contra de cómo hizo su Reforma Educativa, ya que por principio, no tenía que haber quedado en el Artículo 3 constitucional, puesto que es donde están las Garantías Individuales de todo mexicano.
“Resulta que pusieron que yo tengo derecho a que me hagan un examen y que si no lo paso, me despidan”, exteriorizó Juana Alicia Espinosa de los Monteros, por lo tanto su manifestación es plena inconformidad con la palabra “permanencia”, y aunque confiesa que existen maestros incompetentes, la gran mayoría sí realiza su trabajo adecuadamente.
Existe cantidad importante de puntos que no están escritos, pero que a largo plazo afectarán el trabajo de todo el sector educativo; al leer el Artículo 3, Fracción tercera, dice que la permanencia laboral va a depender de un examen, lo que en respuesta a nombre de todo el SNTE, Espinosa de los Monteros aseguró que es una contradicción, ya que al haber sido contratados se cubrió el perfil requerido bajo elementos de capacitación.
A su vez confesó y declaró estar a favor de la Reforma Educativa, puesto que las reformas son necesarias para un crecimiento en todo sector, siempre y cuando se refleje un verdadero cambio, “estamos a favor de la evaluación, pero una evaluación para mejorar, no para que determine mi permanencia o no en el magisterio”, con lo que el Sindicato está en desacuerdo.
A pesar de que las autoridades educativas señalan que no está en riesgo el trabajo del magisterio, en la Reforma no está escrito así, por lo tanto el SNTE exige manifestarlo en las leyes secundarias, tal y como se hizo en la creación del Instituto Autónomo de Evaluación, donde señalaron “con punto y coma” los cómos del involucramiento de los padres, los alumnos y los maestros en la resolución de los problemas de la escuela, “para nosotros están involucrando a los padres a que paguen la responsabilidad del gobierno”.
En la sección en que se señala que la educación será gratuita, los maestros se encuentran confundidos, puesto que estarán cobrando cuotas que a pesar de que no serán obligatorias, a los papás se les presiona a presentarlas, “está como oculto, pero está establecido en la Constitución”.
Por tanto, declaró ser una Reforma Laboral, ya que no establecen los cómos, sino puntos para el ingreso y la promoción que será a través de un examen, “estamos de acuerdo que entren los mejores, pero no nada más es un examen”, también se debe tomar en cuenta una permanencia frente a grupo, su preparación, personalidad y no nada más los conocimientos.
En suma, los inconformes requieren saber los cómos y que queden escritos en la misma Constitución, “si al maestro no le gusta trabajar, entonces que vaya a donde le paguen sin trabajar”, pero si los maestros trabajan en su grupo y son de eficientes, por un examen no pueden despedirlos.
Es ésta su gran inquietud, ya que a pesar de asegurarse lo contrario, “Emilio Chuayffet nos quiere desaparecer, hay que regresarlo a Arabia, pues de allá es”, finalizó la líder estatal.
Foto: Gerardo González