Después de que el Real Madrid venciera al Valencia en los cuartos de final de la Copa del Rey, los merengues recibieron en el Santiago Bernabéu a sus vecinos de Getafe. El pasado más reciente de los blancos no es el mejor, han perdido muchos puntos en Liga ocupando la tercera posición y su juego no es ni el más atractivo, ni el más efectivo. La victoria en Copa dio una motivación al conjunto madridista, que retomó su juego de la campaña pasada haciendo un gran partido contra Getafe.
Durante la semana, la complicada realidad que vive el Madrid volvió a dar nota. Según un diario español, los capitanes del equipo, Iker Casillas y Sergio Ramos dieron un ultimátum al presidente del equipo, Florentino Pérez, pidiendo la salida de José Mourinho al finalizar la temporada. “O él, o nosotros.” Fueron las palabras publicadas en España. Pero como no todo puede ser mala noticia, el domingo se jugó futbol.
Y los merengues volvieron a ser ese equipo de pegada, que resuelve partidos en dos o tres minutos. Cristiano Ronaldo tomó el papel de líder y anotó tres de los cuatro goles en la victoria blanca. El primero al minuto 62, otro tres minutos después y el tercero a los 72, para terminar firmando el 4-0. Goleada del Madrid previa a la semifinal de Copa frente al Barcelona.
La afición y el equipo se reencontraron en Cristiano, quien ha estado fantástico en los últimos partidos. El Bernabéu disfrutó nuevamente de buen futbol y los aplausos, gritos y cánticos silenciaron los silbidos de las últimas fechas. Un equipo que parece despertar apenas a mitad de temporada, esperemos por la salud de su narrador que no sea demasiado tarde para celebrar algo esta campaña.
Pero el Barcelona también jugó, y vaya si lo hizo bien. Sabiendo el resultado del Madrid, los catalanes recibieron en Camp Nou al Osasuna. Si horas antes el madridismo se desbocaba con Cristiano, después del partido el mundo entero se rindió ante Messi. El argentino volvió a dejar en claro quién es el mejor jugador del mundo (¿de la historia?) primero dejó sentado al portero rival sólo moviendo la cadera para después entrar casi caminando a la portería, 1-0 para el Barça. Al 24 el Osasuna logró empatar y parecía le haría partido al Barcelona. Cuatro minutos más tarde expulsión y penal para el Barça, comienza el show de Leo.
El penal dio el segundo gol para el Barcelona y para Messi. Antes de terminar el primer tiempo, Pedrito anotó el 3-1 y el segundo tiempo fue un mero trámite. Rápido, 10 minutos del segundo tiempo y Messi nuevamente anota. 4-1 Barcelona, hat-trick de Leo. Al 58 pique, remate y gol de Messi, el cuarto para él, el quinto para su equipo. Un espectáculo verle jugar.
El clásico se calienta. El Real Madrid llega en su mejor forma esta temporada y el Barcelona… bueno, es el Barcelona. Cristiano anotó un hat-trick, Messi un poker. Son las semifinales de la Copa del Rey, competición a la que el Real Madrid ha apostado muchas de sus fichas, la diferencia en Liga con el Barca es demasiada y lo que se juegan los blancos este miércoles en el partido de ida es mucho. Bienvenido sea el 2013, bienvenido sea el primer clásico del año.