Por presumir, a mis amigos les conté… que Carlos Lozano de la Torre asistiría a la “elección” de la nueva dirigencia de Movimiento Ciudadano, a la planchadísima toma de protesta como dirigente del partido de Vicente Pérez Almanza, pero no, al final el gobernador prefirió asistir al Hermanos Carreón a ver cómo las Panteras le ganaban a los Soles de Mexicali (88 a 85) para empatar la serie a dos.
También la alcaldesa Lorena Martínez prefirió no asistir, así que los naranjas naranjas realizaron su fiesta en el Teatro Morelos con Sergio Reynoso Talamantes y Luis Fernando Muñoz encargados de las representaciones. Así las cosas, a darle a la especulación, primero lo obvio, no asistieron los primeros priístas de la entidad por eso mismo, finalmente, era una fiesta de Movimiento Ciudadano, y tampoco es para tanto.
Segunda especulación. Mejor dejar solo a Pérez Almanza en su fiesta, a rozarse con Armando López Campa (Mr. Tuitero de Izquierda según Demócratas de Izquierda), pero sobre todo para evitar cualquier reencuentro con Carolina Rincón Silva, quien saltó del PAN para convertirse en secretaria de acuerdos del Movimiento Ciudadano, y con ello, digan lo que digan, el petate del muerto de la vuelta a la escena política de Luis Armando Reynoso Femat.
Rebambaramba. En este punto, más que enumerar las posibilidades de especulación, vale más la pena sentarse a esperar, cuaderno de apuntes en mano, a todo lo que se le puede dar juego con la reaparición de Rincón Silva, desde que es la forma de cobrar los favores que Reynoso Femat le hizo a López Campa cuando se lanzó como candidato, hasta cómo afectará la composición de la dirigencia de Movimiento Ciudadano las posibles alianzas.
Se ve, se siente, la sinergia está presente. Reaparece el larfismo justo cuando Guadalupe Ortega y Gregorio Zamarripa le recuerdan al perredismo que sería hasta natural que se aliaran en contra del PAN; en este momento en que ante el relevo de delegados, la caída en SCT de Enrique Peralta Plancarte y cómo arrastra a Antonio Martín del Campo, dejando libre el camino a José Luis Novales Arellano; cuando el Partido del Trabajo retoma sus conferencias, releva al aburridísimo Adán Pedroza y vuelve a tomar el micrófono Héctor Quiroz para darle un espaldarazo a Felipe de Jesús González Ramírez… más lo que se sume esta semana.
Todos unidos contra… pues sí, contra Martín Orozco Sandoval, en el fondo, los escenarios de candidatos arriba enumerados, tienen como punto de partida, una respuesta de las familias políticas al capricho del senador panista, quién sabe qué tan bueno sea concederle tanta importancia, en una de ésas recupera (si es que alguna vez la ha tenido) la influencia que hizo fuerte al ex alcalde en el ámbito local. El mismo riesgo que se corre al otorgar un peso mayor a la reaparición de Carolina Rincón, quien lo primero que salió a decir es que su jefe (no Vicente Pérez Almanza no, Luis Armando Reynoso) no pensaba seguirla en su aventura por la “izquierda”, que prefería seguir haciendo su luchita en el PAN. ¿Le creemos?
Explicación no pedida, acusación manifiesta. Bajo esa luz, habría que ver la primera declaración de Pérez Almanza, acerca de que el Movimiento Ciudadano no será basurero para ir recogiendo lo que otros partidos vayan tirando… bueno, ¿cómo le explicamos al ex regidor?, ya tendrá tiempo de pensarlo, a ver si las complicaciones en que lo meterá su secretaria de acuerdos le dejan tiempo libre para la reflexión, pues Rincón Silva no es muy querida entre los amigos de los medios, mientras que de sus dotes como negociadora (sin el apoyo de presupuesto) están en duda. Y como muestra basta el botón de cómo el PAN perdió Calvillo, entre muchos muchos otros ejemplos.
Lealtad mata carita. Ya hay quien quiere ver como la nota del día la reaparición de la ex vocera de Reynoso Femat, pero creemos que no es para tanto. Lo que está en juego para las próximas elecciones le queda grande a este tímido, por no decir apocado, anuncio de regreso del ex gobernador. Lo que sí hay que considerar es que la lealtad que Vicente Pérez Almanza tiene a sus amistades es mucha, tanta como para poner en riesgo a su partido.
No le importa. Cada vez es más fuerte el rumor de que en el PRI ya sólo quedan cuatro aspirantes con verdaderas posibilidades de quedarse con la candidatura tricolor a la alcaldía capital, en desorden: Francisco Chávez Rangel, Alejandro Alba, Roberto Tavarez y Enrique Rangel, sin embargo, eso no le importa a Óscar López Velarde y sigue haciendo su luchita, y es que luego le mandan señales encontradas, como la de ayer, cuando el gobernador Lozano de la Torre distinguió con su mención a sólo dos de sus colaboradores durante la colocación de la primera piedra de Unipres: López Velarde y Alejandro Díaz Lozano, secretarios de Desarrollo Urbano y Ordenamiento Territorial. Con felina sonrisa atendió a los amigos de la prensa López Velarde, como si supiera algo que el resto no, como si la mención lo volviera a poner en la carrera, quizá.
Lo que nosotros suponemos… es que no, pero no meteríamos la mano al fuego.
Ahora que si de menciones se trata, pero desde Palacio municipal, los amigos de la prensa lograron que Lorena Martínez revelara algunos nombres de quienes quieren participar en el proceso de selección del tricolor para poder ser candidatos: los regidores Lucía Armendáriz y Alejandro Regalado, el síndico Ikuaclanetzi Cardona Luiz, así como el secretario del Ayuntamiento, Luis Fernando Muñoz y el arquitecto Francisco Guel, ésos son quienes ya confesaron a la alcaldesa sus aspiraciones. Hay más, pero mañana le seguimos con esta lista que, si juega bien sus fichas, bien podría conformar un vigoroso bloque lorenista en la próxima Legislatura.
La del estribo. Quien suspira y suspira y está muy puesto para pelear la alcaldía de Pabellón de Arteaga, es Cuauhtémoc Escobedo Tejada, ya manifestó abiertamente que “ya se vio”, no la tendrá difícil el dirigente del PRD, por un lado puede contar con el hartazgo de la población de ese municipio hacia los gobiernos de Nueva Alianza, y por el otro, Escobedo Tejada estuvo a muy pero muy poquitos votos de obtener la Presidencia Municipal en este municipio.
Para mañana: alguien trae ganas de pelea, se quiere subir al ring de los debates, a ver si le dan las cuentas, por lo pronto, en el PRI no han dicho que no, pero tampoco que sí.
