- Innecesario que un homicida pase la vida tras las rejas: Angélica de la Peña Gómez
- “Importante reinsertar, no rehabilitar ni readaptar, ésos son conceptos totalmente arcaicos”
En el Pleno del Poder Legislativo de Aguascalientes yace un total de cuatro iniciativas para tipificar el feminicidio como delito autónomo. El último dictamen sobre el particular, presentado por Miguel Ángel Juárez Frías, presidente de la Comisión de Justicia, propone que el feminicidio sea acuñado como una modalidad del homicidio calificado y que, además de una pena de hasta 50 años de cárcel, el victimario se haga acreedor al pago de “multas, reparación del daño y demás obligaciones legales”.
Dicha iniciativa dispone que un feminicidio ocurriría cuando una mujer sea privada de la vida, “cuando haya sido incomunicada o violentada sexualmente, vejada, mutilada o bien, haya existido violencia intrafamiliar en activo contra ella, o bien, elementos que presuman causales de discriminación”.
En este contexto, aunque como “experta” en el tema se dijo a favor del establecimiento de un tipo penal autónomo, Angélica de la Peña Gómez, presidenta de la Comisión de Derechos Humanos en el Senado de la República, consideró que 50 años en la penitenciaría constituyen una penalización suficiente.
“Yo no formo parte de quienes se sienten satisfechos de que ante la comisión de un delito grave haya que mantener a esa persona toda la vida en la cárcel. Creo que es importante reinsertar a las personas, no rehabilitar ni readaptar, ésos son conceptos totalmente arcaicos, sino incidir en una reinserción social para que tengan realmente una posibilidad de poder trascender los caminos de la delincuencia”.
Al señalar que el país requiere la construcción de “una distinta masculinidad”, aseveró que mientras más pronto inicie el proceso de reinserción social de quien ha roto las leyes penales más probabilidades hay para alejarlo del sendero ilegal.
Asimismo, respecto a la tipificación del feminicidio, la legisladora perredista indicó:
“Hay una preocupación legítima por parte de muchísimos juristas, muchísimos penalistas, de propios jueces, en el sentido de que al no quedar debidamente configurado el tipo penal efectivamente puede dar lugar a que el susodicho tenga libertad, a que simplemente no se le pueda comprobar la comisión de delito. Insisto, además de tipificarlo en el Código Penal, definir con puntualidad los procedimientos”.
Recomendó a la diputación local “tomar en consideración además del Código Penal del DF, también el Código de Procedimientos Penales porque están debidamente inscritas las reglas de cómo tiene que proceder cada autoridad”.
Dijo que la tipificación “en el caso del Distrito Federal es sumamente exitosa”. Angélica de la Peña consideró que el eventualmente nuevo tipo penal mostraría sus “bondades” dentro de un sistema penal acusatorio, cuya adopción está en proceso en todo México.
En este sentido se dijo preocupada de que camino a la aparición del nuevo sistema de impartición de justicia existan estados que no muestren avances en materia de preparación de policías ministeriales, ministerios públicos y del propio Poder Judicial.
“Insistimos mucho en que tienen que formarse, tienen que capacitarse. Además de instalar todos los inmuebles para la realización de los juicios orales”.
El sistema penal acusatorio, comentó por último, es una plataforma “garantista” que también favorecería la citada reinserción social del individuo.
Foto: Gobierno del Estado de Aguascalientes / Archivo