CONCLUSIÓN 3. CÍRCULO VICIOSO DEL NARCOTRÁFICO, MINA DE ORO DEL IMPERIO. Este tema se ha estudiado ampliamente; yo sólo lo expongo con el orden y la claridad que considero necesarios para su mejor comprensión; mi aportación, en todo caso -de carácter económico, sociológico y político- es la Teoría del Círculo Vicioso del Narcotráfico, que explica el perverso procedimiento aprovechado primero por la clase dirigente (potentada) de Estados Unidos y ahora por su heredero el imperialismo financiero mundial, a los que no les interesa la salud pública ni la vida de nadie, con tal de multiplicar sus ganancias con el doble juego cuyos pasos se describen a continuación:
3.1. PROHIBICIÓN. Primera pinza.
3.1.1. Adicción. Los adictos a las drogas psicotrópicas siempre han existido, pero la adicción también puede crearse o incrementarse mediante la venta barata o la distribución gratuita para provocar la prohibición. Su fomento es, precisamente, la llave que enciende el motor.
3.1.2. Prohibición. Sin investigar las causas y alternativas de solución, gobernantes torpes reaccionan como lo espera el delincuente: prohibiendo su producción, distribución y consumo, sin considerar que lo prohibido atrae; según la Biblia, el fruto prohibido fue la causa de todas las desgracias humanas.
3.1.3. Síndrome de Abstinencia. Los adictos, acuciados por la falta de la droga, se ven obligados a buscarla; la demanda está creada.
3.1.4. Mercado Negro. La demanda de drogas, a su vez, crea el mecanismo para satisfacerla: el mercado prohibido, que por ser de riesgo establece precios exorbitantes, a pesar de que su producción es muy barata.
3.1.5. Narcotráfico. Para satisfacer la demanda de las drogas ilegales, negociantes sin escrúpulos organizan la producción y distribución capitalista de las drogas. Surgen los carteles, apoyados por las mafias que los apoyan con la venta al extranjero.
3.1.6. Guerra contra las Drogas. El gobierno de Estados Unidos aparenta preocupación por el incremento de la oferta de drogas ilegales. Y si el gobernante nuestro es más tonto de lo que creíamos, lo convence para que declare la War on Drugs a fin de evitar que lleguen a su territorio; es decir, lo utiliza como mercenario al que ni siquiera le paga por que lo defienda. Volvemos a repetir la frase ya famosa acerca de que el problema es suyo, pero los muertos son nuestros.
3.1.7. Terrorismo de Estado. La lucha del ejército contra el narco y de éstos entre sí también tiñe de sangre al pueblo.
3.2. APOYO AL NARCOTRÁFICO. Segunda pinza.
3.2.1. La CIA controla el Narcotráfico. La clase dirigente (potentada) apoya también a los narcotraficantes con el pretexto de que su gobierno necesita drogas para sus combatientes en todo el mundo y hasta para financiar otras guerras. Su brazo ejecutor es la CIA.
3.2.2. Lavado de Dinero. Sabiendo que sus ganancias van a ser lavadas por los bancos de sus nuevos socios los potentados invisibles, los narcotraficantes las depositan en ellos, engordando sus negocios. A más drogadictos, más prosperidad para el capitalismo financiero. El círculo queda cerrado por ambas tenazas.
3.3. NEGOCIOS ADICIONALES
3.3.1. Negocio Privado. Venta de Armas. Una vez prohibidas las drogas, los empresarios de la industria bélica aprovechan el enfrentamiento entre los gobiernos y los narcotraficantes para venderles armas tanto a unos como a otros (remember Fast and Furious). A más muertos, más prosperidad para su industria militar.
3.3.2. Negocio Público. Consolidación del Imperio. Con el pretexto de combatir el narcotráfico, el imperio utilizó la Guerra contra las Drogas como instrumento para continuar sometiendo a sus colonias con el fin de saquear nuestros recursos por si llegara a desaparecer el espantajo del comunismo, lo cual ocurrió en 1991. ¡Negocio redondo! ¿Qué había que hacer para mantener funcionando ese auténtico círculo vicioso en forma permanente y en la máxima extensión territorial posible?
3.3.3. Negocio Público Internacional: utilización de la ONU. Para beneficiarse con la firma de convenios que prohibieran mundialmente todas la drogas psicotrópicas (menos las más peligrosas: alcohol y nicotina, a las que seguramente eran adictos los proponentes), cosa que lograron en Febrero de 1971 con el “Convenio sobre Sustancias Sicotrópicas”; tan sólo cuatro meses después, Richard Nixon declaró su famosa War on Drugs (Guerra contra las Drogas).
A partir de entonces el Departamento de Estado, el Pentágono, la CIA y la Escuela de las Américas redoblaron sus esfuerzos para controlar nuestros ejércitos, sobre todo después de que en 1973 se establecieran las bases de la pavorosa Operación Cóndor.
3.3.4. Ley de Seguridad Nacional. Finalmente, con el pretexto del atentado a las Torres Gemelas en 2001, Bush hijo plasmó la “Doctrina” de Seguridad Nacional de Truman en una Ley de Seguridad Nacional de la que empezó a imponer copias al carbón en los países latinoamericanos, con las que profundizó su dominio en áreas clave de nuestra región.
(Penúltima parte)
Aguascalientes, México, América Latina