Al Pueblo de Aguascalientes
Honorable Ayuntamiento Constitucional del Municipio de Aguascalientes 2011-2013
Presente
Por este conducto me dirijo a esta soberanía municipal para exponerle la siguiente denuncia ciudadana en virtud del derecho de petición del cual gozamos todos los individuos en este país.
Su servidor es natural de Aguascalientes y, como tal, estoy orgulloso de su historia y tradiciones, de ahí que haya recibido con beneplácito y alegría la noticia, en días pasados, de que este gobierno municipal en funciones se dignó rescatar la heráldica municipal oficial aprobada en 1946. También es digno de reconocérseles el hecho de que tal medida trajo aparejada la creación de un reglamento municipal que regula las características, uso, difusión y reproducción del mismo.
Desafortunadamente, es verdaderamente indignante que dicha disposición sea, como se acostumbra en este país, una ficción jurídica más. Y peor aún, que no sea respetada y cumplida a cabalidad por su autor, en este caso, el Ayuntamiento de Aguascalientes. A lo largo de estas semanas posteriores a la aprobación de la normatividad en cita, he visto en varios medios y en toda la ciudad, propaganda oficial del Municipio que lleva, en algunos casos, el escudo de armas aprobado (junto con la divisa “H. Ayuntamiento Constitucional del Municipio de Aguascalientes 2011-2013) y, en otros casos, la heráldica en desuso o ni eso siquiera.
Tal pareciera que el Ayuntamiento, o mejor dicho, el área de Comunicación Social del Municipio estuviera jugando en todos estos casos al poner o quitar a su antojo dicha insignia oficial. Es claro que dicha área está contraviniendo, con claridad indiscutible, una norma jurídica que, desde su publicación en el Periódico Oficial del Estado, no sólo entra en vigor para los efectos legales conducentes, sino que es de observancia obligatoria tanto por las autoridades municipales como por la ciudadanía.
Para su servidor, esta situación no significa otra cosa más que una burla para quienes sí tenemos conciencia y memoria histórica, amén de un amor profundo a la “patria chica”. Repito, considero lamentable que Ustedes como gobierno, una de dos: o no respetan y cumplimentan lo que aprueban como máximo órgano de gobierno en el Municipio, o no existe la exigencia, por parte dicha soberanía municipal, a quienes conforman la administración pública municipal para que observen, en todo momento, lo que su máximo órgano de gobierno aprueba para su mejor conducción.
En suma, suplico y ruego a Ustedes, como órgano máximo de gobierno en el Municipio de la Capital, tomen cartas en el asunto, ya que la Presidenta Municipal no muestra interés alguno, y hagan cumplir lo que aprobaron en Sesión de Cabildo de fecha 1 de octubre del año en curso y, de ser necesario, incoar responsabilidad administrativa y legal contra aquellos que no están cumpliendo con su deber, ya que como reza un principio de derecho: “La autoridad hace sólo lo que la ley expresamente le faculta”.
En espera de que esta denuncia ciudadana sea atendida y tomada en consideración, me despido de Ustedes no sin antes reiterarle las seguridades de mi atenta consideración.
ATENTAMENTE
Ignacio Santos