Regina, Saskatchewan, Canadá. 7 de agosto de 2009. El Consejo de la Federación –la versión canadiense de la Conferencia Nacional de Gobernadores, la Conago- exhorta al gobierno de su nación para que facilite los trámites necesarios para obtener la visa que permita a los mexicanos visitar el País de la Hoja de Maple. Entre las entidades federativas más vocales en la defensa de los vínculos con México aparecen Alberta, Manitoba y Quebec.
La escena arriba descrita sirve como introducción al presente artículo, el cual tiene por objetivo explicar al amable lector la importancia de la relación entre el Canadá y México -resaltada por la visita que efectuará el presidente electo, Enrique Peña Nieto, a Ottawa- y cuál sería el rol que podría jugar Aguascalientes dentro de esta relación bilateral.
Para el mexicano promedio, el nombre Canadá evoca imágenes de escarpadas montañas, frondosos bosques –donde mora la fauna típica de la América boreal-, y fértiles praderas por donde cabalgan, enfundados en sus túnicas escarlatas, los Mounties –policías montados-. Sin embargo, como se presenta a continuación, la relación México-Canadá es diversa y estrecha.
México y Canadá establecieron relaciones diplomáticas en 1944. Desde entonces, se ha creado una serie de mecanismos e instituciones que han fortalecido dicha sociedad: La Cámara de Comercio de Canadá en México, fundada en 1982, la cual fortifica los vínculos comerciales; La Alianza México-Canadá signada en 1994, piedra angular de la relación bilateral pues sirve de catalizador para la acción concertada entre ambos países; finalmente, el Acuerdo de Movilidad Juvenil firmado en 2010, que permite a los jóvenes de ambos países viajar y trabajar en la otra nación.
Como toda relación humana, el intercambio cultural es primordial: espectáculos tales como el Cirque du Soleil, Cavalia y la orquesta de cámara La Pieta, han deleitado a los espectadores mexicanos; en el mundo de la música pop artistas como Justin Bieber y Nelly Furtado han arrancado suspiros entre el público azteca. Por último, en el 2002 la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) instauró la Cátedra Atwood-Roy con el fin de incrementar el perfil de la literatura canadiense.
Más todavía, en 1995 el Centro de las Artes de Banff –provincia de Alberta- se asoció con el Fondo Nacional para la Cultura y las Artes (Fonca) para invitar a los virtuosos mexicanos de la música, las artes visuales, la literatura y la danza para que participen en talleres llevados a cabo en dicho instituto. Esta iniciativa ha fortalecido los lazos entre la comunidad artística de ambos países.
En el plano turístico, México es el segundo destino para los canadienses, con 1.8 millones de visitas por año. Al mismo tiempo,130 mil mexicanos visitaron el País de la Hoja de Maple en 2011. Por si fuera poco, 50 mil jubilados canadienses, quienes huyendo del crudo invierno de su país, han hecho del País de los Volcanes su hogar, fijo o temporal. A su vez, más de 17 mil mexicanos trabajaron en el sector agrícola canadiense. Finalmente, 10 mil mexicanos, en promedio, estudian en Canadá anualmente.
Sin embargo, no todo es miel sobre hojuelas entre Canadá y México: algunas compañías mineras canadienses se comportan como verdaderos señores de horca y cuchillo de la globalización e infringen los derechos laborales de sus empleados, desprecian a los ejidatarios, y contaminan, con sus prácticas depredadoras, el medio ambiente de los lugares donde se han asentado.
En otro orden de ideas, a nivel de entidades federativas destaca el Protocolo de Entendimiento y Amistad para una Relación de Hermandad signado el 25 de junio de 1999 entre el estado de Jalisco y la provincia de Alberta, el cual formaliza la cooperación entre ambas partes. Alberta –la tierra de los jinetes- inauguró su Representación en la ciudad de México en 2002, con el objetivo de estimular los lazos económicos entre dicha entidad federativa canadiense y la República Mexicana. Finalmente, Alberta estableció, en 2005, en Guadalajara un Centro Educativo.
En el caso particular de Aguascalientes, el Maestro Jaime Escalera Jiménez –miembro del CAEEI y especialista en logística- propone que la Agro-esfera –que incluye un agro-parque y su red agro-logística- sea el anzuelo “para hacer alianzas con las provincias canadienses de Alberta, Manitoba y Saskatchewan”, las cuales pudieran utilizar a nuestra entidad como “plataforma logística” para distribuir sus productos en América del Sur. Dicha alianza pudiera “enmarcarse dentro del Súper Corredor de América del Norte” (NASCO, por sus siglas en inglés).
El escribano espera que las conversaciones entre el mandatario electo, Enrique Peña Nieto, y el primer ministro, Stephen Harper, fomenten una mayor colaboración entre México y Canadá –encarnada por sus respectivos súper héroes, El Santo y Johnny Canuck, para lograr dos objetivos: revivir la vía trilateral, tan necesaria en materia de seguridad y comercio– esperando que el Capitán América entienda que los problemas trasnacionales requieren soluciones ídem; y que Canadá ya no sea más el “otro socio”.
Aide Mémoire.- 15 naciones asiáticas decidieron el 20 de noviembre de 2012 crear una Alianza Económica que excluye a los EUA.
* Colegio Aguascalentense de Estudios Estratégicos Internacionales, A.C.
