Podrían reactivar ferrocarril del Istmo de Tehuantepec

• Ferrocarriles Nacionales de México “sobrevive” por litigios pendientes
• Que nos digan los jubilados qué podemos hacer por ellos: Zaragoza

Juan José Zaragoza González, secretario general de la Sección 2 del Sindicato de Trabajadores Ferrocarrileros de la República Mexicana (STFRM), dice que Ferrocarriles Nacionales de México no ha desaparecido, depende de dos cuestiones: el Ferrocarril del Istmo de Tehuantepec y las demandas de sus ex trabajadores en Aguascalientes.

Entrevistado por La Jornada Aguascalientes, para conocer las quejas de jubilados, que pagan cuota sindical y seguro de vida, “sin tener lo uno, ni lo otro”, en opinión del ex trabajador Heriberto Oziel Díaz Hernández, el dirigente sindical dijo que: “se habla que podrá ser reactivado el Ferrocarril del Istmo de Tehuantepec, porque es una ruta estratégica para México”.

Y nada más por eso no puede desaparecer totalmente la vieja empresa Ferronales, en liquidación desde 1999. Y no puede desaparecer “porque aún tiene varias demandas de ex trabajadores, no concluyó su relación laboral. Inclusive, hay algunas inconformidades de jubilaciones proporcionales, desde el año 1999, año del cierre total de los talleres de Aguascalientes”.

Dijo ignorar el número de demandas, pero recordó que hace unos cuatro años, ganaron sus juicios 72 ex trabajadores.

—FFCC Nacionales de México en liquidación no puede desaparecer porque algo lo mantiene “vivo”, aparte de sus relaciones laborales en litigio con sus ex trabajadores, es también el ferrocarril del Istmo de Tehuantepec. ¿Habrá un nuevo proyecto por ahí?

—Para México, se considera un punto estratégico y sigue siéndolo porque no se privatizó, continúa siendo el dueño nuestro país. Es un punto estratégico, se quiere hacer algo parecido al Canal de Panamá, para unir al Golfo de México con el Pacífico. Todo se privatizó: Coahuila-Durango, Ferrosur… México, es posible que lo explote porque si abre la brecha, lo que es el Istmo con el Golfo, habría comunicación y más beneficios para el país.

Explicó el líder sindical que el ferrocarril del Istmo de Tehuantepec es la única propiedad que le queda al Ferrocarril Nacional de México, e intentan modernizar la vía ferroviaria para unir el Pacífico con el Golfo de México.

(Hay que recordar que esta vía ferroviaria de 207 kilómetros empezó a construirse en 1895 y en 1907 la inauguró su constructor Porfirio Díaz. Para 1914 movía, de acuerdo a la investigadora universitaria oaxaqueña Leticia Reina, 855 mil 827 toneladas entre las costas de Oaxaca y Veracruz, y en 1917 Venustiano Carranza canceló la concesión inglesa y se acabó el sueño del Istmo. En 2005 abandonó la ruta la empresa Ferrocarriles del Istmo de Tehuantepec y este año, el líder ferrocarrilero Víctor Flores Morales, promueve que sea privatizada, porque “nos va mejor”, dice).

Comentó el dirigente ferrocarrilero de la Sección 2, Zaragoza González, que hay varios proyectos “durmiendo el sueño de los justos”, como la vía Aguascalientes-Guadalajara, que tiene más de 20 años queriéndose hacer. Se han hecho algunos tramos y hasta ahí se han quedado.

“En 15 años privatizados, ojalá ahora se haga realidad porque acortaría distancias. Hace 25 estaba el proyecto Durango-Mazatlán, y mejor lo utilizaron para autopista. La Guadalajara-Aguascalientes o Encarnación, por ahí va a llegar”, dijo.

—Jubilados se quejan de pagan cuota de 36 pesos mensuales y no tienen servicios sindicales; y pagan otra cuota de 36 pesos mensuales, de un seguro de vida, que tampoco les aporta beneficios. ¿Cuál es su comentario?

—Todo sindicato X tiene seguro social, forma parte de nuestra organización. Los jubilados, ¿qué beneficios tienen? Tienen su póliza de seguro de vida. De acuerdo a los estatutos, pueden y deben venir a las asambleas. (Actualmente es de poco más de 43 mil pesos).

Resaltó: “hay un grupito antagónico que constantemente está agrediendo a la organización porque dicen que el edificio es de ellos, pero es del Sindicato Ferrocarrilero de la República Mexicana desde 1933”.

Y enfatizó: “que nos digan qué apoyos necesitan, pero no que nos vengan a agredir, a decir montón de cosas. Estamos demandados por todos lados por ellos. Sin embargo, si ellos traen un documento que les avale como propietarios del edificio, nos sacan con la mano en la cintura. El Sindicato es propiedad del Sindicato. Que nos digan en qué los podemos ayudar”.