- Simuladores
- De tu arte a mi estrategia
- No hay tacos, pero hay burritos
Los hechos. El miércoles 30 de mayo llega un comunicado de prensa avisando que el viernes 1 de junio se realizará un simulacro de elecciones en la Universidad Autónoma de Aguascalientes. Al día siguiente, al más puro estilo peñanietista, respeta pero se deslinda el Instituto Federal Electoral (IFE) e indica que no avala la organización de ningún simulacro y es ajeno a ese tipo de eventos. El mismo 31 de mayo, la conspicua Secretaría de Estrategia, Información y Propaganda del Partido Revolucionario Institucional, usando como ariete al Frente Juvenil del PRI señala que los organizadores del simulacro son los “mismos que están detrás de marchas Anti-Peña Nieto” y “se encuentra la mano de la izquierda que quiere posicionar a su candidato”, como pruebas demoledoras adjuntaron a su correo electrónico dos imágenes de conversaciones en Facebook (en serio). El viernes 2 de junio, Mario Andrade Cervantes, rector de la UAA, aclara a este diario que el simulacro se suspendió a petición de los organizadores. El sábado, Víctor Hugo Arroyo Jamaica y Miguel Tonatiuh Aguilar Sarao, respectivamente presidente y secretario general de la Asociación Nacional de Estudiantes de Ciencia Política y Administración Pública (ANECPAP) remiten a los medios de comunicación un llamado de atención y solicitud de aclaración a Luis Gonzalo Esparza Llamas, presidente del Frente Juvenil priísta, por sus declaraciones en contra del simulacro (ver contraportada de este diario) y lo exhortan a que presente pruebas o que se disculpe.
Lazos familiares. El motivo del comunicado de la ANECPAP es que las declaraciones incluidas en el boletín de prensa priísta fueron emitidas por Gonzalo Esparza Llamas, dirigente del FJR e hijo Gonzalo Esparza Parada, quien labora como director de Infraestructura Educativa dentro de la UAA, además de ser hermano de Francisco Esparza Parada (Secretario de Salud en el ejecutivo estatal), y además de hermano del recién electo presidente de los estudiantes de la carrera de Derecho en la UAA, Gabriel Esparza Llamas.
No me ayudes compadre. Al final, el simulacro no se realizó y todos se echan la bolita y en ese pase de la papa caliente, sólo consiguen enlodar a la UAA. Todo se vale con que cada uno de los involucrados siga con su estrategia, tarde o temprano alguno de los simuladores tendrá que pagar los platos rotos de andar enlodando nombres y organizaciones.
De tu arte al mío… Si se entiende la estrategia como el arte de planear y dirigir las operaciones de un conjunto para alcanzar un objetivo determinado, en esa materia, los partidos de Aguascalientes han dado muestra de una pobreza apabullante. Incapaces de ponerse de acuerdo para un simple intercambio de ideas, han puesto en un brete al IFE para la organización de los debates. Eso sí, ninguna de las organizaciones políticas asume el costo político de no tener el suficiente valor para, a través de los medios, presentar sus propuestas a la ciudadanía. Casos penosos son los del Partido Nueva Alianza, que ante las invitaciones a presentarse en diversos foros, suele salir con la batea de babas de que no les llegó el correo y no estaban enterados; los del Verde Ecologista, fieles a su vocación de imitadores, hace lo mismo que los priístas y suelen escurrir el bulto; acerca de las artes del PRI para evadir cualquier confrontación se pueden llenar páginas y páginas que muestras las contradicciones con su propaganda, pues mientras en las calles tienen a un montón de personas en los cruceros pidiendo a los automovilistas que les permitan regalarles una propuesta, a la hora de los debates son poco ingeniosos para dar el esquinazo.
No hay a cuál irle. Miguel Romo Medina ante pregunta expresa sobre la asistencia a los debates, intenta darle la vuelta señalando que sí están debatiendo, casa por casa, que están tocando puertas y platicando con la gente… Ajá, pero eso no es debatir. Alfredo González, candidato a diputado federal al Distrito II, un día se dice dispuestísimo a masticar tuercas, para que una vez que deja plantados a los que organizan los debates, mandar a decir que siempre no, que en el partido no le dieron permiso.
La sincera sinceridad. En esto de las estrategias o pretextos, destaca Pilar Moreno, candidato tricolor a diputado federal por el Distrito I, quien hasta mandó a convocar a conferencia de prensa para decirle a los reporteros que siempre ha sido muy claridoso y que a él le encantaría debatir pero que no ha recibido ninguna indicación de su partido (que alguien le diga cómo funciona el asunto), porque él se siente con mucha libertad, “como para que podamos hacer planteamientos concretos ante preguntas que puedan salir, que nos pueda hacer el IFE o que puedan plantearse en el propio debate por los demás aspirantes a esa tan añorada diputación y que bueno, siento con mucho respeto que nos corresponde por la confianza que nos está dando la gente” (ajá, otra vez).
De colores. Lo que resulta evidente es que la estrategia consiste en aburrir a los representantes de los medios en conferencias donde se hace política ficción, ahí está el ejemplo del encuentro de Pilar Moreno con los reporteros, un largo soliloquio sobre las virtudes de la posibilidad de algún día, si se puede, si se logra, si se llega a dar, de instalar una deshidratadora. Casi 20 minutos de expresar las bondades de un castillo en el aire. Apabullados, los reporteros ya no hicieron comentario alguno, ni se dieron por aludidos por la frase con que dio por finalizada la conferencia el orgulloso encargado de prensa priísta: “No hay tacos, pero hay burritos”.