- Según encuesta del ICESI con datos del 2008
- Actúa solo, generalmente, pero también hubo ataques en grupos
De acuerdo con las estadísticas del Instituto Ciudadano de Estudios Sobre Inseguridad Pública (ICESI), el perfil común del delincuente en Aguascalientes es el de un hombre joven, que trabaja solo, sin relación con la víctima y que, al momento de cometer el delito está en plena consciencia de sus actos.
Según la Encuesta Nacional sobre Inseguridad de 2008 (ENSI-6), durante ese año se denunciaron 15 mil 922 delitos, principalmente distintos tipos de robo y fraude. El mismo estudio señala que la mayoría de ellos fueron cometidos por una persona de entre 18 y 35 años.
Del total de individuos que fueron denunciados ante la Procuraduría General de Justicia del estado (PGJE), el cinco por ciento era menor de 18 años, pero el 26.7 por ciento tenía entre 18 y 25 años y el 31.2 por ciento estaba entre los 26 y los 35 años. En el 12.8 por ciento de los casos el presunto delincuente tenía entre 36 y 45 años y el 10.7 por ciento tenía de 46 a 60 años.
La tendencia nacional reflejada en la encuesta ciudadana es igual: 31.7 por ciento de los que cometieron algún delito estaban entre los 18 y los 25 y el 30.3 entre 26 y 35 años de edad.
En la variable de género, se tiene que el 91.1 por ciento de los delitos por los que se interpuso denuncia fueron cometidos por alguien del sexo masculino y sólo en 8.3 por ciento de los casos el responsable fue una mujer. El .6 por ciento restante se refiere a ilícitos en los participaron delincuentes de ambos sexos.
Esta parte del perfil es similar a la del nacional, en el que 1.1 por ciento de los delitos fueron cometidos por mujeres, pero en el 7.6 por ciento de los casos participaron personas de ambos sexos.
Acerca de los delitos cometidos en la entidad, las estadísticas de ICESI revelan que los robos, fraudes, extorsiones, asaltos, violaciones y lesiones registrados en la ENSI-6, el 49.1 por ciento de los delitos fueron perpetrados por una sola persona; 27.3 por ciento los llevaron a cabo dos personas; 5.7 por ciento, cuatro delincuentes.
El 3.8 fueron ejecutados en grupos de cinco personas, el 2.6 en tríos y el 1.6 entre seis o más delincuentes.
Mientras, a nivel nacional la mayoría de las víctimas dijo haber sido atacada por dos personas en un delito (34.5 por ciento) y por una sola (29.3 por ciento); sin embargo, también se refirieron a ataques entre tres y por grupos de más de seis delincuentes.
De los datos de la encuesta también se obtiene que al momento de cometer el delito, el responsable no estaba bajo la influencia de alcohol o drogas, lo que se respondió por el 47.7 por ciento de las víctimas; sin embargo, el 31.1 por ciento no supo o no respondió, mientras que el 13.6 y el 7.5 dijeron que el delincuente estaba alcoholizado o drogado.
En el 79.8 por ciento de las denuncias locales, los delitos fueron cometidos por alguien desconocido para la víctima, en contraste con el 1.1 por ciento que fueron llevados a cabo por familiares. El mismo patrón se observa en la estadística nacional.
Aún cuando se lograron estas respuestas, las víctimas encuestadas afirmaron, en un 75.4 por ciento de los casos, que no podrían reconocer al delincuente.