Un joven de 19 años fue ejecutado en fraccionamiento Ojo de Agua, cuando pretendía escapar de sus homicidas, el mismo fue alcanzado por las balas ocasionando que quedara tendido en la banqueta frente al número 110 de la calle Segunda Privada Delicias, en medio de un charco de sangre; el hoy occiso llevaba por nombre Juan Manuel Campos, con domicilio en la misma calle pero con numeral 141 del mencionado fraccionamiento.
Según versión de su progenitora, la señora Ramona Campos de Luna manifestó a las autoridades tanto municipales como ministeriales, que escuchó cuando una voz de sexo masculino le gritó a su hijo por su nombre y acto seguido se escucharon varias detonaciones, al salir de su vivienda observó que una camioneta con vidrios polarizados se daba a la fuga hacia la calle de Mariano Hidalgo, y su hijo estaba tirado sobre la banqueta; mientras tanto, el automotor desaparecía de la vista de algunos moradores, quienes indicaron que era una camioneta Chevrolet Astro, color café sin placas de circulación y con vidrios obscuros, y a bordo cuatro sujetos de la cual sólo bajó una persona del sexo masculino de complexión delgada, quien portaba una pistola en la mano y realizó disparos en contra de la humanidad de Juan Manuel.
Minutos después arribó una patrulla de la policía preventiva municipal, cuyos oficiales solicitaron la presencia de una ambulancia y fue la unidad número 14, de la Cruz Roja, la que llegara al lugar y cuyos paramédicos confirmarían la ausencia de signos vitales de Juan Manuel, por lo que solicitaron la presencia de las autoridades de la Procuraduría de Justicia; a la llegada de los policías ministeriales, descubrieron que frente a una camioneta pic up color blanca, estacionada frente a la casa de la ejecución, en su parte frontal, se encontraban cinco casquillos percutidos, pertenecientes a una arma calibre 45, así como algunos tiros útiles, que según dijeron los investigadores tal vez se debió a que el arma homicida se les pudo encasquillar y al cortar cartucho salieron de la recámara.
Según los primeros resultados de la investigación y declaraciones que dieron algunos vecinos de la zona, argumentaron que el asesinado se dedicaba a la distribución de drogas en dicha demarcación, por lo que las indagatorias comenzaron con la línea de un problema de drogas entre bandas rivales; por su parte los familiares del hoy occiso, dijeron desconocer porqué lo habían matado toda vez que el joven no tenía problemas con nadie.
Finalmente el cuerpo del infortunado fue trasladado al Servicio Médico Forense (SEMEFO), para practicarle la necropsia de ley y conocer cuántos impactos por arma de fuego presentaba el cuerpo de Juan Manuel Campos.