- El premio mayor para Luna
- Quince años de Ciencias Políticas de la UAA
- La Feria del Libro sin país invitado, ¿ya no alcanzó el dinero?
Felicidades a Diego Lanas por su medio millón de pesos obtenido con un premio en San Sebastián. Seguramente será ese total el primer depósito que el actor le haga al erario público local para empezar a pagar los diez millones de pesos que nos debe por patrocinarle el filme, depósito anunciado desde la semana anterior por directivos del Instituto de cultura local.
Y como dijera una animación digital de un medio nacional, palabras más, palabras menos, que la cinta de "Abel" para lo único que sirvió fue para que el resto del país se diera cuenta que en Aguascalientes también hay miseria y gente pobre. ¡Vaya promoción para el estado!
Por un lado felicitar a los alumnos y exalumnos de la carrera de Ciencias Políticas y Administración Pública de la UAA, por el aniversario de la carrera que cumplió 15 años formando jóvenes para tratar de enderezar en algo la maltrecha vida pública local.
Pero no todo es miel sobre hojuelas, pues aunque una de las partes esenciales de la carrera es la política, siempre hay que saber identificar estas prácticas de la identidad académica, lo cual parece no existir para algunas personas que utilizan organismos como la ANECPAP para crear cotos de poder, lamentablemente.
Estas asociaciones estudiantiles se convierten en un bastión para gente de poca ética y alto ego, aprovechándose de estos espacios de conocimiento para convertirlos en agencias de viaje, cuando la esencia de estos objetivos queda de lado, como es la discusión de las ideas y el enfrenamiento de argumentos politológicos.
Es así que los resultados tampoco son los mismos, pues cualquier actor o intento de político le apuesta a tomar el mando de estudiantes hambrientos de trabajo, pero no con estudios sino meramente con capital económico.
La reivindicación a la crítica es uno de los caminos para los estudiantes de la ciencia política y la administración pública, quienes tienen la capacidad suficiente para discernir sobre la búsqueda del poder por el poder mismo y la vocación de construir un mejor entorno.
El año pasado uno de los avances más cacaraqueados para la Feria del Libro del año anterior fue justamente que había un país invitado del cual tuvieron varios escritores representantes de Argentina que fueron distinguidos de manera específica, en aquella ocasión se dijo, porque estamos interesados en que la feria transite hacia otro nivel, pero en este año ese gran logro se esfumó.
Efectivamente hay autores internacionales participando de la Feria, pero si fue uno de los avances, hay quienes dicen que para atrás ni para agarrar vuelo, será que ya no les alcanzó el presupuesto o simplemente en el transcurso del año consideraron que ese importante logro en realidad no era tan significativo.
Por cierto, tanto Jean Meyer como un historiador asistente a la presentación de su libro de los cristeros les reclamó públicamente que abran de nuevo un espacio para que pongan en exposición la colección aquella de Encarnación de Díaz que compraron para hacer el Museo Cristero que les duró poco tiempo el gusto, ojalá que así como pusieron como plato fuerte la presentación del libro de los cristeros, de la misma forma escuchen la voz del experto que dijo deberían poner los objetos en exposición.