Los trabajadores de las instancias federales, específicamente los del Instituto Nacional de Geografía (INEGI) denunciaron públicamente ante este medio el engaño del que fueron víctimas de las Sociedades Financieras de Objetivo Múltiple (SOFOMES), en particular de Consupago. Esta empresa estaba funcionando a través de un convenio con el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), pero se promovía bajo el nombre de CREDISSSTE por lo que una buena cantidad de empleados se dejaron llevar y terminaron pagando tres veces la cantidad que pidieron inicialmente.
“Los créditos denominados CREDISSSTE son manejados por una empresa particular, una empresa privada a través de un convenio que se firmó con el instituto donde la única obligación de este era la retención del descuento que el trabajador haya acordado con la empresa en razón del préstamo otorgado”, comentó el delegado del ISSSTE en Aguascalientes Raúl Becerra Ontiveros.
“CREDISSSTE como tal no existe, lo que existe es una empresa que se llama Consupago, que es la que financia y la que cobra, ese fue el nombre comercial que le pusieron para la publicidad”.
“Eso en su momento lo firmó la administración anterior del licenciado, me parece que se firmó en el 2006, el licenciado González Roaro, debo reconocer que en todo caso el nombre fue inadecuado, no debimos haberlo hecho, de hecho ya hay una normativa que prohíbe el uso del nombre institucional para fuera de los ámbitos institucionales propiamente dichos”.
Tanto Becerra Ontiveros como el delegado de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (CONDUSEF), Juan Carlos Medina Mazoco coincidieron en que una parte de este abuso fue responsabilidad de los trabajadores por no pedir la información completa que debe requerirse en un caso como este, donde un dato primordial es saber cuánto se va a pagar en total, sin importar que tan accesibles parezcan los abonos quincenales o cuánto tiempo de plazo haya para cubrir la totalidad del adeudo.
“El problema aquí es que el trabajador firma el pagaré entonces ya firmando el pagaré es imposible deshacer esta operación, las alternativas que hemos estado buscando y que Consupago ha estado ofreciendo vía la CONDUSEF es que en el momento que el trabajador se inconforma se cierra el saldo a la fecha y le permite al trabajador pagar el total del saldo hasta ese momento para que se ahorre los intereses futuros, eso es lo único que se puede hacer”.
La empresa no ha sido clara, pero los trabajadores tampoco han preguntado por esos detalles que son esenciales, en este caso la recomendación principal de la CONDUSEF es que en principio tiene que enterarse de cuánto es el Costo Anual Total, deben enterarse de qué tasa de interés están cobrando, comisiones, gastos de cobranza o de cualquier otra índole para que no haya sorpresas al momento de que el trabajador comienza a realizar su pago.
“Esta empresa lo que hace, porque así se manejan este tipo de créditos, es si yo te prestó 5 mil te voy a cobrar quincenalmente 450 pesos durante 90 quincenas, entonces al trabajador se le hace fácil, le entra, pero nunca calcula el costo hasta que ya está empezando a pagar, luego vienen los problemas y las inconformidades porque se dan cuenta que estas SOFOMES manejan costos que van del 50 al 60 por ciento anual y en algunas ocasiones hasta más”.
“El instituto no avala en ningún modo ni las características del crédito en cuanto a si es oneroso o no para el trabajador, si es elevada o no la tasa de interés que está cobrando porque este es un acuerdo entre particulares, el trabajador como particular con una empresa también particular y entre ellos establecen un acuerdo de cuánto será el interés”.
El delegado agregó que falta cultura financiera, poca gente al pedir un préstamo pregunta que es el Costo Anual Total (CAT), las personas se van con la finta del porcentaje que inicialmente les dicen que les van a cobrar un 2 ó 4 por ciento, pero no corroboran de qué forma será aplicado porque al final el CAT termina siendo de 64 ó 68 por ciento al año.
“El instituto nunca lo promocionó pero también a partir de una serie de reclamos muy fuertes que hubo sobretodo en el estado de Zacatecas, el instituto dejó de darles facilidades para que promocionaran su crédito con los trabajadores y solamente digamos ahorita se está cumpliendo lo que legalmente le corresponde al instituto que es la retención del descuento”, agregó el delegado.
Luego de la entrada en vigor de la nueva ley del ISSSTE se amplió la capacidad crediticia del instituto, la ley establece que los recursos del fondo de préstamos está para dedicarse sólo para ese fin, son revolvencias y por lo tanto la capacidad total de préstamo tiene que ver con la misma cantidad de dinero que haya en este fondo, donde se manejan criterios muy claro en cuanto a los intereses y muy accesibles para los trabajadores. En el caso de Aguascalientes para este año se otorgaron cuatro paquetes de créditos, en total fue una derrama aproximada de 220 millones de pesos.
Aseguró que para ellos era difícil determinar a cuántos trabajadores todavía se les estaba haciendo retención porque cada instancia federal tiene su propia lista de trabajadores que tienen todavía pendiente préstamos.
“Hasta ahorita la referencia que tenemos es que es una empresa que está funcionando correctamente, legalmente, el problema es que el mecanismo de promoción que están usando algunos de sus promotores han estado confundiendo o mal informando a los trabajadores federales porque les hacen firmar toda la documentación pero no han sido claros con el Costo Anual Total que están cobrando”, específico Medina Mazoco.
No se puede firmar sino están ciertos de lo que están firmando y mucho menos si son documentos en blanco, el trabajador tiene que estar bien cierto de lo que están firmando para que después no se hayan dado reclamaciones, aquí no han sido tantos los trabajadores pero en Zacatecas fueron alrededor de 400 trabajadores los que se presentaron para inconformarse y es por eso que ya tienen muy definida la problemática e incluso la capacidad de la CONDUSEF que es limitada.