- Un signo de esta patología es la incapacidad de controlarse y se responde violento
- Se puede originar desde la infancia ante deficiente orientación sobre el manejo de sentimientos
Las personas con inmadurez emocional son propensas a tener arranques de ira en situaciones de estrés, arremetiendo de manera violenta contra otras personas y objetos, esta patología en su mayoría tiene que ver con un incorrecto manejo de las emociones promovido por los padres en la infancia, explicó Héctor Grijalva Tamayo, director de Centro de Salud Mental “Agua Clara”.
“Son personas que no han aprendido a establecer su nivel de equilibrio, todos tenemos las emociones, todos tenemos la capacidad para experimentarlas”, el especialista detalló que incluso enojarse es natural y saludable, pero este enojo se convierte en un problema cuando existe la incapacidad para controlarse sobre todo en situaciones de estrés respondiendo de manera violenta.
La madurez emocional se consigue a través de educación y se adquiere con la edad, explicó Grijalva Tamayo, por lo que destacó el papel de los padres en la enseñanza del control de las emociones a los hijos, que en ocasiones ante la mala orientación e incluso el ejemplo da como resultado que un individuo sea incapaz de reaccionar de manera mesurada ante un enojo e irrumpe ten ira.
“El ejemplo número uno es el de una pareja que habla sobre dinero, que siempre es el tema crítico genera angustia e inquietud, como andan las finanzas, porque el dinero no rinde en la casa, cuando la mujer le da explicaciones al hombre y este no quiere seguir hablando porque no tiene respuestas se enoja, es un pretexto para no seguir dialogando, es una reacción muy infantil”, estas situaciones pueden presentarse no sólo en el hogar sino en todos los entornos los amigos y el trabajo, llegando a ser un problema al no poder controlarse.
A lo dicho, el director de “Agua Clara” agregó que cuando el niño ve que su padre se enoja cuando se habla de temas serios toma ese ejemplo y aprende que esa es la reacción que debe tener cuando se tocan temas que no le gustan o donde no se hace lo que él pide. “Es el clásico caso del berrinche de un niño en un supermercado se tira en el suelo pataleando, es una reacción infantil ante la frustración y descarga toda su furia, allí es muy importante cómo la madre enseña al hijo a manejar esa frustración y aceptar razones”.
Agregó que entre la clase política suelen darse estos arranques de ira ante cuestionamientos de la prensa respondiendo de manera violenta, lo cual señaló es un indicativo que ante otras situaciones más serias o críticas, puede llegar a tener otras reacciones viscerales y descargar la furia contra quien no tiene la culpa “eso lleva a los excesos del poder”.
El experto señaló que la mayoría de las personas que se presentan en el centro de salud mental que tiene a su cargo, están relacionados a asuntos emocionales y su mal manejo, subrayó que en sólo en casos raros el problema es un síntoma de otras patologías como algunas formas de epilepsia se manifiesta una hiperactividad emocional.