- Gobierno contrató operadores del PANAL y ve voto dividido con Lorena
A pesar de haber admitido desconfianza en el Consejo General del Instituto Estatal Electoral (IEE) e insistir en la intromisión del gobierno estatal, el candidato panista a la gubernatura del estado, Martín Orozco Sandoval se vio ganador el 4 de julio y aunque advirtió el voto diferenciado entre él y la priísta Lorena Martínez, estimó que no se dará en el mismo porcentaje que en la elección local de 2004.
Martín Orozco Sandoval asistió ayer al programa En Voz Alta, el análisis, en esta ocasión conducido por Horacio J. González y Manuel Appendini, coordinador editorial de esta casa, calificó el apoyo del presidente de la República como el de un militante más y criticó al Consejo del IEE por carecer de responsabilidad y actuar parcialmente.
Del actuar del Ejecutivo estatal detalló que favorece al Revolucionario Institucional a través de “la distribución de apoyos del sector social, la traición a los trabajadores: que si votan, que si los ven conmigo o equis, los corren”, así como obligarles a presentar una lista de 20 personas como pirámide de apoyo y contratar a 50 operadores del Partido Nueva Alianza (PANAL) “para trabajar desde el gobierno”. El panista subrayó que estas condiciones no son nuevas, que “así se percibía desde hace seis años, cuando (Luis Armando Reynoso) subió al poder”.
En aquella campaña electoral, aseguró, trabajaron el voto diferenciado “pero fuerte, el trabajo fue intenso por abajo, con promoción y con redes y por arriba con calcas” y ya en lo público, en lo cotidiano, “por arriba, veías coches con calcas de Luis Armando-Carlos”, lo que derivó en un voto diferenciado de ocho por ciento.
Señaló que “ahora no se ha dado” en esa magnitud, sino que un sector “que ha analizado este tema” plantea el voto “Martín y Lorena, pero –insistió- no se va a dar en el mismo porcentaje de hace seis años”.
El exalcalde condenó, por otro lado, la actitud asumida por “una persona del Consejo General” durante el registro de representantes electorales, aseverando haber sabido de una plática en donde se decía que “¿para qué nos metemos en broncas?, mejor lo registramos, de todos modos el PRI va a venir y lo va a registrar”.
Aseguró que entre él y Fernando Herrera nunca ha habido diferencias, “hemos trabajado en el equipo” desde 1997 y “en muchísimas luchas internas del partido”, pero él estuvo con Reynoso porque pudo funcionar ahí.
LARF no tuvo ánimo de llegar a acuerdos
Al abordarse el tema de la reunión que sostuvo con el actual mandatario dos días después de su designación, Orozco Sandoval reveló que “me acuerdo que le dije: bueno, Luis, no sé por qué le apostabas a Cuadra si sabes que Cuadra no ganaba. Dice: bueno, la coyuntura estaba a lo interno. No me dijo qué, ni me dijo si sabía que iba perder, pero sabía perfectamente que Cuadra perdía afuera o era el candidato cómodo para que ganara Carlos. Al final dijo: bueno, adentro tenía varios acuerdos con grupos. Esa era la clave (…). Afuera estaba resuelto, así me lo dijo”.
Aseguró que aún después de esto, lo incitó a buscar un acuerdo con el presidente del Comité Ejecutivo Nacional (CEN), César Nava, cosa que Reynoso reconoció era la vía y que, sin embargo, no se llegó a eso. “Al final, la película es que veía mucho con ganas de no acordar”, dijo.
Guerra sucia es “parte” del sentir de la sociedad
Con respecto a la multicitada guerra sucia que hay entre PRI y PAN y entre sus candidatos al gobierno del estado, reconoció que la campaña de propuestas duró sólo unas semanas; sin embargo, aseguró que parte de lo expuesto en las denuncias de uno y otro partido es parte del sentir social.
En materia de propuestas, habló sobre el replanteamiento de la deuda pública, de retomar los proyectos estratégicos y utilizar la reserva territorial para reactivar la economía e incluir a los niños y jóvenes en la cultura y el deporte, parte de un proyecto integral.
Emprendió una vez más la defensa de sus propiedades y su historial, y el ataque al priísta al comprar que, mientras el pueblo vive en crisis, “el negocio del político va bien”. Insistió en que la presentada por Arturo González y Jorge Ocejo “no es una denuncia falsa, están las escrituras de las propiedades”. Que le explique al pueblo, que le explique a la sociedad”.
En su oponente vio “una obsesión de guerra sucia, de estrategias maquiavélicas, de estar desesperado (…) que olvide esa derrota de hace seis años”.
De retroceso para la libertad de expresión
En el segundo bloque del programa, se contó con la presencia del catedrático Enrique Rodríguez Varela para hablar sobre la libertad de prensa y que en el sexenio gubernamental que está por terminar en Aguascalientes fue de retroceso en cuanto a esa libertad de expresión porque en el afán de monopolizar la comunicación se ha pretendido gobernar a través de boletines que presentan a la ciudadanía un realidad que no es tal y que, por presiones y falta de un código de ética, pero también de un respaldo por parte del lector, gran parte de los medios de comunicación locales terminan por legitimar en sus publicaciones.
Replantearon por otro lado, la pregunta que Héctor Aguilar Camín puso en la mesa a través de su publicación en la revista Este País, acerca de si los medios de comunicación realmente cumplen con su labor de generar una ciudadanía más y mejor informada y consecuentemente más inteligente.
Para Rodríguez Varela, uno de los obstáculos es que el periodismo se ejerce en medio de la libertad de prensa, pero también de la libertad de empresa y, contrario a lo que desde el punto de vista de Appendini Carrera debiera ser, en la realidad los dueños de los medios son empresarios y no periodistas.
Otra cosa que hace falta es un gremio de reporteros que se respalden unos a otros frente a las intenciones de censura de la clase política, pues cuando un medio es contestatario o de oposición, los demás lo aíslan y lo dejan desprotegido.
En un panorama donde coartar el derecho a expresarse es la constante, se requiere profesionalismo e investigación, actuar como gremio, contar con un código de ética, pero también formar una “alianza con el lector” que legitime y proteja el trabajo de un reportero.