El joven y fino espada ibérico José Mari Manzanares, hijo, podría estar ausente de la feria de San Marcos que está prácticamente a media cuadra de distancia del señor Cronos.
Esta nota que tiene absolutas perchas de rumor, en caso de confirmarse sería una nota negativa más al serial más importante de México; lo anterior ha llegado desde España vía telefónica emitida por gente absolutamente de crédito y que se ha movido, apenas llegada, entre las alcobas de la intimidad de la fiesta brava local.
Ya el padre del coletudo referido, el maestro alicantino de idéntico título, declaró en medidos de comunicación especializados en el tema, que “primero está la salud de su vástago”, y luego “la profesión”.
Para poder actuar en las últimas tardes en que ha salido el diestro, ha tenido que ser medicado para contrarrestar los dolores, sin embargo ya ni así han mermado éstos. Ahora el diestro está en manos de galenos, los cuales determinarán, según estudios científicos concienzudos, si podrá cumplir con las escrituras que tiene ratificadas o deberá reposar por tiempo indefinido.
Este murmullo no ha caído nada bien a un grupo de aficionados, ya que existe un buen grado de ánimo para ver la presentación de este elemento ibérico que ha acrecentado su cartel luego del domingo de resurrección en Sevilla, en cuyo dorado ruedo derramó parte de su arte refinado dejando perfumado, junto con Morante, el aire del coso.
Sería una pena que se cumpliera a realidad este hecho, que junto con el otro rumor de la suspensión del “Payo”, dejarían varias vacantes complejas de llenar… pero no imposibles.