- En ningún momento tuvieron contacto con quien dijo haber sido maltratado
- Se afirma que la dependencia no tiene intervención alguna en el giro de los antros
El presidente del patronato de la Feria Nacional de San Marcos, Raúl Álvarez desmintió en entrevista vía telefónica la versión de que ellos hayan ejercido algún tipo de maltrato o acción discriminatoria, en contra de quienes pusieron el año pasado un antro de nombra Moksha con una manifiesta tendencia hacia un público gay. Incluso dijo que desconocía que en esta zona haya antros con nombres como Bambú, Dalí u otros. Ellos finalmente sólo se dedican a establecer un contrato de arrendamiento de los espacios.
Los antros tienen cada uno de ellos un contrato con el patronato, en dicho contrato se incluye el nombre del antro y una persona como encargado del antro. Los empresarios cada año pueden cambiarle el nombre al lugar si así lo desea, en esto el patronato no tiene injerencia alguna. Álvarez dijo conocer solamente a una persona de nombre Nicolás Martínez que fue quien hizo originalmente el contrato con el patronato, dicho contrato concluye en este 2010.
“Si él hizo un acuerdo con alguien más, bien hecho el acuerdo si está dentro de los términos del propio contrato, en ningún momento yo le puedo asegurar por mi persona alguien fue maltratado por discriminación, eso se lo puedo reafirmar, en ningún tuve yo contacto”.
Raúl Álvarez dijo desconocer a Markos Macías Ponce que fue quien declaró haber recibido discriminación de parte de gente del patronato. “El no puede venir a negociar conmigo porque no existe en el sentido legal, no tiene un contrato conmigo, cómo puede llegar a decirme que quiere ponerse otra vez; él tiene que ir con la persona con la que hizo el acuerdo el año anterior y llegar a un acuerdo nuevamente”.
Cada año antes de llegar la feria, la gente del patronato se reúne con los arrendatarios de los antros, no para negociar los contratos o el monto de las rentas aunque finalmente no especificó ya cuales son los temas que se tratan en estos encuentros.
El patronato no tiene injerencia alguna en las decisiones que cada uno de los contratistas toma en relación al giro, decoración y manejo de sus lugares, son finalmente instancias como reglamentos municipales, la PGR, PROFECO, ISEA. Son diferentes instancias las que revisan la operación, pero el patronato no tiene alguna intervención en los giros de los antros.
“La preferencia sexual de los asistentes puede ser la que cada quien quiera y tenga, el dueño del antro puede ponerle la orientación que él decida, lo único que le estoy reafirmando es que no hay una oposición, nosotros no estamos oponiéndonos a nadie”.
El presidente del patronato incluso negó conocer que exista una demanda interpuesta en contra del patronato porque ellos en todo momento respetaron los contratos establecidos desde un principio que vencen en el 2010. En la sección de transparencia del patronato existe una relación de contratos donde puede verificarse que existe un contrato entre el patronato y Nicolás Martínez existe.