- Recibe alrededor de 4 mil 600 pesos mensuales y se queja de mantener a sindicato
- Revelan actos de “coyotaje” para hacer efectivo su cobro de pensión. Trabajó 24 años para el estado
Los jubilados del sindicato de ferrocarrileros desde hace aproximadamente diez años emprendieron una lucha por la equidad en sus pagos después de varios años de trabajo en la entonces dependencia federal, a esta casa editorial acudió el ex trabajador ferrocarrilero, Heriberto Oziel Díaz Hernández.
Trabajó en el departamento de pintura y ganaba alrededor de mil pesos mensuales, que en aquel entonces era suficiente para poder vivir, sin embargo, cuenta que la queja que ahora tienen radica precisamente de ese ayer en el que había un desfasamiento de su paga por algunos cuantos pesos, que se han convertido en ciento y hasta miles de pesos de diferencia entre los jubilados.
Recibe 4 mil 600 pesos mensuales, pero desde el año 2000 comenzó la pugna por mejores sueldos de jubilación, prestando junto a otras 20 personas un recurso jurídico en la Junta de Conciliación y Arbitraje, con copias en mano, reflexiona asegura que el gobierno federal no ha querido pagarles completamente a los ex trabajadores de ferrocarriles, porque a su experiencia se ha encontrado incluso con “coyotes” que adquieren los papeles y se los llevan a la ciudad de Torreón, para hacer más tardada la espera y obtener un dinero, asegurando que uno de estos es Melchor Elías López.
Con vestimenta modesta y en la playera colgándole un pin del “gobierno legítimo”, Díaz Hernández continua su queja, en el sentido de que les siguen cobrando una cuota de recuperación para la manutención del sindicato cuando éste ya no cumple con las funciones estrictas de una organización gremial.
Incluso, el jubilado mostró fotografías donde está demostrado que las instalaciones del sindicato se convirtieron en un lugar de entretenimiento para bailar. Agregó que existen oficinas de atención para los ex trabajadores y que la promesa cuando el ferrocarril se privatizó era que tendrían todas las facilidades para tramitar su salida, situación que desde su perspectiva no se ha cumplido.
En este sentido, aseveró en contra de Jesús Manuel Mascareño Valenzuela, de quien dijo que es el encargado de los asuntos legales y que en varias ocasiones ha complicado el cobro de la pensión por parte de los ex ferrocarrileros.
Ya cansado de tanta burocracia y por la falta de compromiso del gobierno federal, Díaz Hernández detalló que para efectos jurídicos siguen dando continuidad a las demandas presentadas tanto a nivel local como central, reclamando también del actuar de su dirigente y diputado federal, Víctor Flores.
Con sus 62 años, entre los que se cuentan los 24 que tuvo de servicio tanto en Aguascalientes como en Irapuato, demostró su hartazgo por estas cuestiones y pidió la comprensión de las autoridades para avanzar en sus derechos.