Aunque en Aguascalientes “hay un gran número de personas que, teniendo derecho a fianza, no están en libertad porque no tienen para pagarla”, ha incrementado la lista de delitos catalogados como graves, que no dan derecho a libertad bajo caución y es esta la razón de que haya sobrepoblación en los penales de la entidad, afirmó ayer el magistrado presidente del Supremo Tribunal de Justicia del estado (STJ), Juan Arturo Muñiz Candelas, justificando en este sentido la construcción de un anexo al Centro de Readaptación Social (CERESO) de la salida a Calvillo.
Entre éstos, calculó sin tener cifras precisas a la mano, hay aparte más de 300 procesados detenidos que se encuentran a la espera de una sentencia, lo que sucede debido también al engrosamiento del catálogo de delitos de este tipo.
Muñiz Candelas señaló que en muchos casos, son los familiares quienes se rehúsan a “participar en la libertad caucional de la persona”; en el segundo caso, indicó, el incremento en la comisión de delitos graves como el robo a casa habitación y robo de autos, entre otros tipos, así como de violaciones y corrupción, ha contribuido a que sean más quienes se encuentran privados de su libertad por esta razón que por falta de recursos económicos.
Según lo dicho por las autoridades de seguridad pública, la población en los cinco penales de la entidad fluctúa siempre cerca de los mil internos, de modo que tan sólo los que están a la espera de una resolución del juez de primera instancia son casi la tercera parte.