Luego de un largo proceso de donación y permuta para tener unas instalaciones propias, la fundación Amigos por siempre registrada bajo la razón social de Institución de Asistencia Privada (IAP) se quedó sin ese espacio luego de una revocación promovida por el propio ayuntamiento bajo el argumento de que los beneficiarios no hicieron uso del espacio sin haberse cumplido el plazo de doce meses que estipula la ley. Específicamente el responsable de relaciones públicas de la asociación, Guillermo González Gómez responsabiliza de estos hechos al regidor José Luis Proa de Anda y en su momento procederán en su contra si es necesario.
El primer encuentro entre las autoridades y los miembros de la asociación fue el 6 de abril del 2004 cuando el director de la fundación, Ruperto Razo Fuentes hizo una petición al ayuntamiento por escrito donde justificaba los fines de la organización y el porqué era importante para ellos contar con un espacio físico donde las personas que estaban en rehabilitación por algún vicio pudieran vivir su proceso de recuperación. Fue durante la administración de Ricardo Magdaleno Rodríguez, específicamente el 25 de octubre del 2204 cuando se elaboró un dictamen correspondiente a la donación de un predio propiedad municipal del fraccionamiento Lomas del Picacho para la fundación Amigos para Siempre, con una extensión de 7 mil 600 metros cuadrados. El primero de noviembre del 2004 se autorizó la donación.
Fue en la administración de Martín Orozco cuando los vecinos a través de un oficio con fecha 26 de julio del 2006 le solicitaron al ayuntamiento que en el espacio originalmente otorgado a la fundación pudiera hacerse un parque porque era el área de donación de ese espacio habitacional aún cuando algunos de ellos habían dado su firma manifestando su aprobación por la construcción del centro de rehabilitación de la fundación, en esta área según consta en unos documentos de los cuales entregó copia González Gómez. Con la finalidad de no despojar a la fundación del terreno y dejarlos “desamparados”, se les propuso una permuta del terreno en Lomas del Picacho por uno en Las Violetas, esto consta en una acta de cabildo donde se autorizó el procedimiento de la permuta.
Aunque efectivamente se habían retrasado desde un principio en la construcción, en parte dijo González Gómez fue porque no se agilizó tampoco el proceso de escrituración del terreno y ellos no podían empezar a realizar obras en un espacio que era propiedad del ayuntamiento aunque se hubiera dado la donación.
Para el 28 de diciembre del 2007, el ayuntamiento de Aguascalientes autorizó la permuta de un terreno por el otro. Fue a siete meses de que fue hecha la permuta cuando el regidor José Luis Proa promovió una revocación de la donación del terreno con la justificación de que hasta el momento no se había hecho nada en el lugar, aún cuando no se había cumplido aún el plazo de los doce meses. Uno de las posibles razones, aunque eso es sólo una especulación del representante de la organización es que la revocación se dio porque finalmente en estos terrenos es donde está prevista la construcción del fraccionamiento Bicentenario.
De acuerdo a los documentos fue el 24 de julio inicialmente cuando se giró la solicitud de revocación del predio denominado Las Violetas, se incluye una descripción detallada de los antecedentes, de la primera donación, de la petición de los vecinos, del trámite de la permuta y de las razones por las que se propone la revocación que en su caso es por falta de la existencia de escrituras y porque la asociación no ha hecho construcción alguna.
De acuerdo al artículo 7 del reglamento del Patrimonio Inmobiliario Municipal, en sesión ordinario de cabildo el 14 de julio del 2008 se sometió ante al comité municipal de adquisiciones y enajenaciones de inmuebles la solicitud de revocación del predio a lo que el comité respondió que no existe inconveniente para realizar esta petición, según comento González Gómez la revocación terminó de concretarse el 10 de diciembre del 2008, cuando todavía no se cumplía un año.
Desde el momento de la revocación y hasta la fecha se quedó detenido el plan que ya estaban gestando para la construcción con el apoyo de la iniciativa privada, la Secretaría de Desarrollo Social a nivel federal e incluso la Secretaría de obras públicas del estado se habían propuesto para ayudarlos con maquinaria.
Actualmente la fundación brinda atención en un espacio provisional ubicado en la calle Mar de Galilea, número 92, en el fraccionamiento Las Brisas.